Todos recordamos la icónica escena de When Harry met Sally donde Meg Ryan finge un orgasmo en una cafetería. Parecía tan real. Si eres observador y realmente te interesa lo que tu pareja siente, es posible darte cuenta de que una mujer finge el orgasmo. A un hombre lo delata la eyaculación, pero las féminas dan otro tipo de señales que sí, pueden ser actuadas. ¿Por qué las mujeres fingen el orgasmo? ¿Es posible notarlo? ¿Cómo saber si una mujer finge el orgasmo? Aquí tienes 10 señales que la delatan.
¡Comencemos!
Gemidos, respiración agitada, apretar los músculos, cerrar los ojos, clavar las uñas…todo puede ser producto de una brillante actuación. Pero, ¿para qué? ¿qué sentido tiene fingir placer? Las relaciones sexuales son la forma de comunicación más íntima y profunda entre dos seres humanos y el orgasmo tendría que ser el punto más alto de esa conexión.
Sin embargo, se cree que más del 50% de las mujeres fingen los orgasmos, si no siempre, sí en una buena parte de sus encuentros sexuales. Así lo revela una encuesta realizada por la marca de juguetes eróticos Lelo.
Jesús E. Rodríguez, director del Instituto Sexológico Murciano, declaró al portal CuídatePlus: “La tendencia dominante indica que son las mujeres las que más fingen, con porcentajes cercanos o superiores al 50%, pero también se observa que en los últimos años el porcentaje de hombres ha aumentado”.
La frágil masculinidad
Un estudio denominado Do Women Withhold Honest Sexual Communication When They Believe Their Partner’s Manhood is Threatened? (¿Tienen las mujeres una comunicación sexual honesta cuando creen que la masculinidad de su pareja está amenazada?) publicado en la revista Social Psychological and Personality Science, entrevistó a más de 600 mujeres.
Los resultados fueron muy reveladores, ya que en pleno siglo XXI, décadas después del inicio del movimiento de liberación femenina, “las mujeres siguen priorizando lo que creen que sus parejas necesitan sobre sus propias necesidades y satisfacción sexual”, afirmó la autora principal del estudio -coescrito por tres hombres-, Jessica Jordan, estudiante de doctorado en la Universidad del Sur de Florida.
En la cultura latinoamericana
Según esta investigación, las ideas culturales arraigadas sobre la masculinidad pueden ser responsables de que una mujer finja sobre el orgasmo. En culturas como la latinoamericana, la masculinidad aún depende del desempeño en la cama. Los hombres siguen midiendo su virilidad en su pene.
Cuando un hombre no es capaz de satisfacer a una mujer, se siente inseguro, frustrado, con baja autoestima y sus reacciones pueden ir desde el enojo hasta la violencia o la depresión.
Durante el estudio mencionado, se preguntó a un primer grupo de 283 mujeres sobre la masculinidad percibida de sus parejas. Resulta que, a mayor “precariedad” de la masculinidad, mayor ansiedad siente el hombre.
Esto puede significar que el nivel de madurez emocional, los condicionamientos sociales como los roles de género o el machismo, son grandes obstáculos para que la pareja pueda gozar de una vida sexual plena y satisfactoria.
Por otro lado, las mujeres prefieren a los hombres seguros de sí mismos, viriles, “poderosos” y emocionalmente fuertes. Esto las hacer sentir protegidas, seguras, que están “en buenas manos”.
Cuando esa figura del “hombre ideal” se cae, ellas pierden algo muy valioso también, por lo que tratarán de evitarlo a toda costa, aunque eso implique sacrificar su propio placer.
El estudio demostró que cuando una mujer está más preocupada por la autoestima de su compañero, su propio placer sexual y la velocidad a la que llegaban al orgasmo, se reduce.
El segundo grupo de mujeres encuestadas (196), “asumían que la masculinidad de su pareja era “frágil” y que tenían menos probabilidades de proporcionar una comunicación sexual honesta debido a la ansiedad de ellos”.
El tercer bloque (157 mujeres en una relación) completó una encuesta anónima sobre su vida sexual. En esta parte del estudio, se concluyó que “cuando una mujer está preocupada por amenazar inadvertidamente la masculinidad de su pareja, eso podría llevar a una ruptura de la comunicación.”
Hasta aquí, la investigación parece no evidenciar nada nuevo, sólo confirma lo que muchos terapeutas de pareja y sexólogos, han afirmado antes.
Pero hay un dato que sí causa cierto asombro: “las mujeres que ganaban más dinero que sus parejas tenían el doble de probabilidades de fingir orgasmos. La teoría es que estas mujeres posiblemente sintieron que estaban castrando a sus esposos en un sentido financiero, por lo que debían compensarlos en el dormitorio.”
Tristemente, esto no resulta bueno para nadie. Ambos pierden. Que una mujer finja el orgasmo, lejos de ser “benéfico” para el hombre, termina haciéndole más daño. Al respecto, Jordan opina: “Cuando la sociedad crea un estándar de masculinidad imposible de mantener, nadie gana”. No podemos estar más de acuerdo.
¿Por qué las mujeres fingen el orgasmo?
Si bien el estudio anterior nos da buenas pistas, hay muchas otras razones por las cuales, una mujer finge el orgasmo.
Desde anorgasmia (dificultad o incapacidad persistente para alcanzar el orgasmo aun con estimulación y excitación adecuada) hasta el aburrimiento, son algunas de las principales razones por las que las mujeres fingen el orgasmo -según el estudio de Lelo y la opinión de sexólogos expertos-.
- Hacer ver a la pareja que hemos tenido una relación sexual placentera.
- Evitar que la otra persona se sienta mal.
- No estar disfrutando de la relación y preferir terminarla lo antes posible.
- Evitar que la pareja no se sienta deseada.
- Ser “sexualmente normal” (según la idea de que el “código de normalidad” es alcanzar el orgasmo siempre o casi siempre).
- Cumplir con lo que la pareja espera.
- Aumentar la propia excitación. Fingir un orgasmo puede ayudarlas a excitarse y soltarse.
- Evitar conflictos con la pareja.
- No estimulación del clítoris (la mayoría de las mujeres no alcanzan el orgasmo a través de la penetración, pero los hombres, insisten).
- Inseguridad sobre la autoimagen (de la mujer) e intentar tapar la “inseguridad y el miedo” ante la anorgasmia.
- Miedo a perder a la pareja por no ser buena en la cama.
La sexóloga y terapeuta de parejas Laura Morán, autora del libro Orgas (mitos), opina que: “las mujeres fingen el orgasmo por dos motivos principales: por imitación, “porque tenemos un estándar de relaciones sexuales determinado por las películas porno y sobre todo las románticas, que nos muestran un orgasmo simultáneo al que se llega después de dos empujones, y lo reproducimos para no parecer un bicho raro”; o bien, “por irritación” como ella define a una larga sesión de “taladrar” y si el orgasmo no llega, habrá que “premiar” a la pareja por el esfuerzo”.
“Aunque ahora en general las mujeres nos sentimos con derecho a no aparentar en el sexo, la cuestión es que nos sigue dando vergüenza reconocer que no llegamos al orgasmo. Puede deberse a la posición en la que creemos que nos deja, como parejas sexuales poco experimentadas o porque no va a ser bien acogido por el otro. A veces fingimos simplemente para no enfrentarnos al momento desagradable”, concluye Morán.
¿Cómo saber si una mujer finge el orgasmo? 10 señales que la delatan
Desde luego la intención no es lastimarlas ni “tirarles el teatrito”, sino de fomentar la comunicación abierta con el único fin de mejorar nuestras prácticas sexuales. Si ella tiene un problema para alcanzar el clímax, tal vez sea necesario buscar ayuda profesional.
También es posible que tú no la estés estimulando cómo se debe o como a ella le gustaría, pero no se atreve a decírtelo.
Tú puedes ayudarla o dar el primer paso hacia un mayor disfrute de las relaciones sexuales, observando y siendo empático con lo que ella siente.
Lee más en Cómo conseguir que tu chica tenga más orgasmos
En los hombres, hay señales físicas muy claras en la fase de orgasmo (respuesta sexual humana, Masters y Johnson), la principal, es la eyaculación. En las mujeres también hay reacciones corporales que delatan el orgasmo, aun cuando no sean tan visibles.
Desde la fase de excitación, puede ser notorio cómo la vagina se lubrica y se dilata, la vulva se enrojece y el clítoris se hincha, haciéndose rígido debido a la vasocongestión; los pechos aumentan de tamaño y la areola se dilata.
En la fase del orgasmo, el ritmo cardíaco y la respiración llegan a su máxima frecuencia e intensidad. Se produce una gran tensión muscular y contracciones involuntarias de los músculos vaginales y del esfínter anal.
Además de la respuesta física corporal, las manifestaciones de placer pueden ser espontáneas. Esta es la parte donde las mujeres pueden ser expertas en fingir un orgasmo: suspiros, gritos, gruñidos, llanto o risa.
10 señales que delatan si una mujer finge el orgasmo
- Lo que dice y cómo lo dice: si de verdad está sintiendo, palabras como “así, así” o “eso me gusta”, “tócame aquí”, etc., le saldrán totalmente espontáneas. Si la notas cada vez más siendo directa y desinhibida, dando instrucciones y moviéndose de forma inesperada, vas por buen camino.
- Besos: es común que las bocas se acerquen, se den ligeras mordidas, las lenguas se “destrampen” y los besos sean más pasionales. Pero, cuando las mujeres están al borde del orgasmo, los labios se hinchan, se enrojecen y humedecen. También es probable que ella sienta necesidad de respirar por la boca y separe sus labios de los tuyos. Trata de observar si se ve natural.
- La temperatura corporal sube: tampoco es que se sienta afiebrada, pero sí puedes notar el rubor sexual -ojo, no a todas les pasa-. El calor puede sentirse en el tórax y el cuello, incluso puede sudar.
- Los escalofríos no mienten: al momento del orgasmo, la piel se vuelve más sensible a las caricias. Es posible ver y sentir los escalofríos de placer. La piel se eriza y los pezones se ponen erectos. Tal vez esta sea la señal más importante de que sí llegó al orgasmo. Si ella evita que la mires, es posible que esté fingiendo.
- Movimientos arrítmicos: cuando una mujer está cerca del orgasmo, no querrá perderlo y se moverá buscándolo, al ritmo que su cuerpo se lo dicte. Los gemidos se pueden fingir, pero los reflejos, no. Si cambia de postura y sus músculos pélvicos aprietan tu pene o se mueve de manera descontrolada, está teniendo un orgasmo.
- Pupilas dilatadas: de manera inconsciente, tendemos a cerrar los ojos para concentrarnos más en el placer. Pero en ciertos momentos, las miradas pueden cruzarse. Observa sus pupilas. Si está a punto de alcanzar el orgasmo, éstas se dilatan. Claro que sólo podrás verlo con la luz encendida.
- Pezones erectos: cuando una mujer se excita, los senos se ponen más firmes y los pezones se levantan como cuando hace frío. Esta erección bajará una vez pasado el orgasmo.
- Contracciones genitales: aquí es donde no se puede fingir. Si tú estás “en lo tuyo” puede que te lo pierdas, pero si le das tiempo a ella de llegar al clímax y tú te das un momento para poner atención, te darás cuenta del aumento de tamaño del clítoris y de la lubricación. Sentirás también las contracciones involuntarias en los músculos pélvicos y el resto del cuerpo, ejerciendo cierta presión en tu pene.
- Atención a las piernas: si se levanta de inmediato como si nada hubiera pasado, es probable que haya sido un número teatral.
- Pregunta directamente: si fue real, es muy probable que ella misma te diga “me encantó esto” o describa lo que le agradó más. Si no te lo dice, pregunta sin miedo. Es un buen momento para tocar el tema si crees que no está quedando satisfecha. Con tacto y delicadeza, pero se debe buscar la conversación en favor de mejorar las relaciones sexuales y la conexión entre ambos.
Conclusiones
La comunicación abierta y honesta es indispensable para la satisfacción sexual. Nadie nace siendo experto. Aprender sobre las preferencias del otro, conocerse mutuamente y si es necesario, buscar la ayuda de un terapeuta sexual, sólo puede llevarnos a descubrir un mayor nivel de placer y estrechar los lazos de pareja.
¡Muchas gracias por tu lectura!
Artículo validado por Juan Manuel Martinez Preciado, Médico Cirujano con Maestría en Sexología clínica, epidemiólogo, integrante del grupo de dirección médica internacional Boston Medical Group.
¿Quieres saber si tu vida sexual es satisfactoria?
Descubrelo con el siguiente test.
¡Conoce la respuesta en 2 minutos y resuelve tus dudas!
¿Necesitas ayuda?
Somos pioneros en ofrecer tratamientos para mejorar la salud sexual del hombre.
¡Resuelve tus dudas contactándote con nosotros totalmente gratis!
¡Da el paso más importante: el de tener una vida sexual plena!