7 consejos para tener erecciones más fuertes

¿Cómo tener erecciones más fuertes? ¿cómo conseguir que la erección dure más?, ¿cómo hacer para tener una buena erección?, ¿qué comer para tener una erección más dura?  Las respuestas a estas preguntas las tiene seguramente un sexólogo o un urólogo especialista en salud sexual masculina. Pero aquí te vamos a dar un adelanto con 7 consejos para tener erecciones más fuertes. ¿Apuntarás estas recomendaciones?

Introducción

Empecemos por tratar de entender por qué a miles de hombres les preocupa tanto el cómo tener mejores erecciones, ¿a qué se refieren con esto?, ¿qué creen no estar logrando?, ¿piensan que hay “algo más” y se lo están perdiendo?

Reza el dicho: “el que hambre tiene, en pan piensa”. Si miles de hombres buscan en internet o con los médicos, la forma de tener mejores erecciones, es que su capacidad de alcanzar una erección ha disminuido, la pierden muy rápidamente o no es lo suficientemente firme para practicar el coito.

Los hombres suelen creer que son valorados por el tamaño del pene, el desempeño en la cama o la capacidad de procrear. La historia y la ciencia han demostrado repetidas veces que no es así; pero cuando el pene falla o no responde tan bien como lo esperado, no pueden evitar experimentar esa sensación de insuficiencia, frustración, angustia, enojo, baja autoestima o depresión. Obviamente esto se reflejará en todos los demás aspectos de la vida.

Les cuesta mucho trabajo asimilar que esto no es una maldición ni se debe a que hayan hecho algo mal. Es un proceso natural del cuerpo que, conforme envejece, va disminuyendo sus capacidades.

La erección

La erección tiene que ver con una serie de fases que van desde el cerebro hasta el pene, e involucran al sistema endócrino (las famosas hormonas), las neuronas, el sistema nervioso central, los músculos y el aparato circulatorio, sobre todo éste último, que es el vehículo para llevar la sangre hasta los órganos sexuales y hacer funcionar la estructura del pene para que se levante.

El tejido eréctil del pene, los músculos pubocoxígeos, las arterias y los cuerpos cavernosos, deben estar en óptimas condiciones para poder relajarse y contraerse a voluntad. Este adecuado bombeo es el que hará que la sangre fluya en cantidad y con la presión suficientes para lograr una buena erección y mantenerla hasta alcanzar el clímax.

Con el paso del tiempo todos estos órganos y sus funciones, van disminuyendo y las erecciones se vuelven menos rígidas o más infrecuentes. Pero no es sólo una cuestión de edad, el cuerpo se va minando también por la aparición de algunas enfermedades o incluso, por factores psicológicos. Es por eso que no sólo los adultos mayores están interesados en tener erecciones más fuertes, también les pasa a los más jóvenes, entre los 30 y los 50 años.

Que la dificultad para alcanzar o mantener la erección pase una vez cada cuándo, es algo normal y la mayoría de los hombres no se lo toman como una tragedia. Pero cuando se vuelve algo constante, al grado de afectar el estado de ánimo o la vida sexual en pareja, se debe buscar la ayuda de un especialista, porque muy probablemente sí estemos ante un problema de disfunción eréctil que deba tratarse clínicamente.

¿Qué es la disfunción eréctil?

Según los expertos en salud sexual masculina de Boston Medical Group, la disfunción eréctil se define como la incapacidad de lograr o mantener una erección lo suficiente para una relación sexual completa y satisfactoria. Las estadísticas demuestran que esta condición afecta por lo menos a uno de cada dos varones adultos entre los 40 y 70 años de edad. 

El 90% de los casos que se atienden obedecen a anomalías físicas, prácticamente todas asociadas a la insuficiencia vascular (mala circulación), lo que impide que la sangre llegue normalmente al pene. Entre las enfermedades asociadas a deficiencias circulatorias más comunes se encuentran la hipertensión, diabetes, colesterol y triglicéridos altos, enfermedades cardiacas, tabaquismo, obesidad, esclerosis (endurecimiento) arterial y los efectos secundarios de muchos medicamentos para tratar estas afecciones o bien, padecimientos mentales como la depresión.

Existen casos más raros pero que también son causa de disfunción eréctil, como alteraciones hormonales derivadas de enfermedades en los testículos, el hígado o la tiroides; enfermedades neurológicas como Parkinson, esclerosis múltiple, infartos, traumatismos en la columna vertebral o en la zona pélvica como cirugías de la próstata o vejiga.  

La disfunción eréctil psicológica representa sólo el 10% de los casos, pero no por eso es menos importante. Emociones como el nerviosismo, el miedo, la falta de confianza en uno mismo, la ansiedad o la depresión, hacen que el sistema nervioso se active ordenando a los vasos sanguíneos a contraerse. En consecuencia, el flujo sanguíneo se reduce y el pene no responde al estímulo sexual. Además, cuando los ánimos andan por el suelo, ¿quién va a tener ganas de acción?

El exceso de estrés, los problemas de pareja, la falta de atracción hacia el cónyuge o el aburrimiento sexual, también se consideran causas psicológicas de disfunción eréctil y será el terapeuta (psicólogo/sexólogo) junto con el médico urólogo y el sexólogo, quienes ayuden al paciente a abordar su problema desde el origen.

Un dato importante sobre la disfunción eréctil psicológica es que, si no se recibe tratamiento, puede convertirse en disfunción eréctil fisiológica; “atrofia por falta de uso” se le llama a esta condición en la cual, los tejidos saludables del pene se van dañando progresivamente.

Como puedes ver, hay razones de sobra para que tantos hombres se preocupen por tener erecciones más fuertes. Está demostrado que las parejas con una vida sexual más activa, duran más tiempo juntas y sufren menos estrés, depresión, ansiedad, hipertensión, diabetes, úlceras o cansancio crónico. En resumen, son mucho más felices.

Porque queremos que tú también lo seas, aquí tienes los:

7 consejos para tener erecciones más fuertes

• Juega. Si empezaste a tener sexo en los alocados años 80, seguro escuchaste alguna que vez que “lo importante es el juego, no el juguete”.      El sexo es de las actividades más placenteras del mundo, pero no se trata sólo de penetración. Los juegos previos son igual de importantes, desde una conversación erótica, el coqueteo, el póker de prendas, las caricias, juguetes sexuales, videos eróticos (nada con exceso, todo con medida) un baño de tina, hasta disfraces…en fin, “echa a volar tu imaginación” -también frase de juguetes ochentera-. El erotismo abarca mucho más que el coito y por si no lo has experimentado, prolongar la excitación te lleva a un punto en el que el orgasmo será mucho más intenso y lo mejor: tu erección será más fuerte.

• Relax and enjoy it! “Relájate y disfruta”, en español. A veces estamos tan preocupados por la lista de pendientes, que apenas le ponemos atención al goce y nos desconcentramos, con la consecuente pérdida de la erección. Entrenar la mente para estar “aquí y ahora” es algo que puedes lograr a través de disciplinas como el yoga o la meditación. Si estás pensando en los problemas económicos, el trabajo o que al techo le hace falta pintura, te estás perdiendo de lo mejor: la gama de sensaciones por las que pasa todo nuestro cuerpo durante una relación sexual. Pon tus 5 sentidos en la cama y verás cómo tus erecciones mejoran. 
• Aliméntate sana y eróticamente. Una dieta balanceada es fundamental para mantener un buen estado de salud por más tiempo. Visita al nutricionista y pídele que te diseñe un plan personal de acuerdo a tus gustos y necesidades. Incorpora también los “súper alimentos” (superfoods): alimentos 100% naturales que cuentan con más vitaminas, minerales, antioxidantes y fitoquímicos como los arándanos, salmón, semillas, cúrcuma, coco, cacao, chía, matcha, maca, kelp, algas, entre muchos otros. Varios de estos alimentos tienen un efecto en la circulación y te llenan de energía. Elimina las grasas saturadas, la comida frita, el colesterol, el azúcar que no sea natural y los carbohidratos. Además de bajar unos kilos y sentirte más atractivo, muy pronto verás cómo mejora tu circulación sanguínea y el oxígeno en todas las células de tu bello y nuevo cuerpo. Esto es básico para tener erecciones más fuertes, ya que todo se basa en la correcta llegada de la sangre al pene.
• Realiza ejercicios. Además de lagartijas (planchas), bicicleta, sentadillas, nadar o correr, practica ejercicios que fortalezcan tu piso pélvico. El yoga y los ejercicios de Kegel son una maravilla para eso. Son muy fáciles:
• Cerciórate de que la vejiga esté vacía y luego siéntate o acuéstate en una superficie firme flexionando las piernas, lo que te sea más cómodo.
• Ahora, aprieta los músculos del piso pélvico, esos que usas para contener la orina. Mantenlos apretados y cuenta hasta 5.
• Relaja y vuelve a contar hasta 5.
• Aprieta de nuevo.
• Repite esto 10 veces y listo. Hazlo un par de veces al día y verás los resultados. 
• Mantenerte en forma hará que tus erecciones sean más rígidas y así se mantengan a pesar de los años.
• Aléjate del cigarro y el alcohol. Las sustancias tóxicas, incluidas las drogas recreativas, perjudican seriamente el sistema circulatorio, el corazón, el cerebro y hasta el aliento. Un par de copitas para desinhibirse y calentar el momento están bien, pero no te excedas porque resultará todo lo contrario. El alcohol adormece los sentidos y también reduce la capacidad de tener una erección.
• Usen sus bocas. No hablamos de sexo oral. Bueno, sí, también, pero nos referimos especialmente a la comunicación. Habla con tu pareja sobre tus necesidades, tus fantasías, escucha las suyas, pidan lo que les gusta, sean sinceros con lo que no. Griten aunque los oigan los vecinos, díganse cosas sucias o poemas de amor al oído. Todo vale. Dicen que cuando una mujer es tocada por las palabras, las manos no están mucho más lejos. Envíense mensajes por el móvil a lo largo del día, hagan una cita en un bar, conversen y vayan a donde la noche los lleve. Después nos dan las gracias por ayudarles a conseguir una erección más fuerte.
• Sí al sexo real, no al virtual. Un poquito no está mal, pero como en todo, el exceso de pornografía hace daño. Está demostrado por muchos estudios en todo el mundo que mirar demasiada pornografía, puede interferir con tu capacidad de erección o en el impulso de eyacular prematuramente. El cerebro se acostumbra a altos niveles de estimulación de tal manera que cuando te encuentras en una situación real, te parece poco, no te excita lo suficiente para tener una buena erección. Las expectativas que generan los videos eróticos son tan altas, que es difícil que un hombre “de carne y hueso”, pueda alcanzarlas en la vida cotidiana. Recuerda que en esos videos todo es ficción. Eso sin contar con la enorme carga de violencia -especialmente contra las mujeres- que contienen. Practica todo el sexo que puedas pero con tu pareja y en tu espacio verdadero. Eso también es entrenamiento para lograr mejores erecciones.

¿Esperabas una pastilla mágica o un juguito para lograr erecciones fuertes? 

Sentimos mucho decepcionarte, pero tal cosa no existe. El Viagra y otros fármacos vasodilatadores siguen estando entre las primeras opciones para los hombres con disfunción eréctil, pero también tienen desventajas y no todos pueden tomarlos. De hecho, se sabe que hay una tasa de abandono mayor al 50%.

Si tienes problemas de erección, consulta a tu médico. Él te dará un diagnóstico exacto y te explicará sobre las múltiples opciones disponibles para tratar la disfunción eréctil, como la terapia de ondas de choque, que ha probado su gran eficacia en miles de pacientes sin ningún efecto secundario adverso.

Hazte un chequeo médico completo una vez al año y pierde el miedo al urólogo. Especialmente después de los 50 años, todos los hombres deben revisarse esa parte del cuerpo que tanto les preocupa y que tanta felicidad les da.

Además de eso, sigue estos 7 consejos para tener erecciones más fuertes. Verás cómo mejora tu vida sexual.

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Si crees que puedes estar desarrollando disfunción eréctil no dejes de responder las preguntas del test sobre esta patología que puedes encontrar al finalizar esta lectura. 

¡Muchas gracias por tu tiempo!

Artículo validado por Juan Manuel Martinez Preciado, Médico Cirujano con Maestría en Sexología clínica, integrante del grupo de dirección médica internacional Boston Medical Group.