Más allá de los hábitos que sabemos dañan nuestra salud -como una mala dieta o fumar-, existen conductas que, por ser tan cotidianas, pasan desapercibidas. Sin embargo, algunas de ellas pueden estar afectando nuestro desempeño en la cama. Las relaciones sexuales satisfactorias son un pilar fundamental para mantener el equilibrio emocional, la salud física, la autoestima y la armonía en pareja. Si no te sientes 100% feliz con tu vida íntima, es posible que estés incurriendo en hábitos que matan el deseo sexual y pueden llegar a causar disfunción eréctil. ¡Descubre aquí cómo vencer esos comportamientos y recuperar el placer del sexo en el desarrollo de este artículo!
La importancia de la salud sexual
Un estudio denominado Sexual Satisfaction and the Importance of Sexual Health to Quality of Life Throughout the Life Course of U.S. Adults (Satisfacción sexual y la importancia de la salud sexual para la calidad de vida a lo largo del curso de vida de los adultos estadounidenses) publicado en The Journal of Sexual Medicine, indica que para 62,2 % de los hombres y 42,8 % de las mujeres participantes, la salud sexual tiene una gran importancia en la calidad de vida.
El papel que las personas encuestadas dan a la sexualidad en su día a día, varía de acuerdo con el género, la edad, la actividad sexual y la autoevaluación general de la salud. Los hombres y mujeres con excelente salud manifiestan mayor satisfacción que los participantes con regular o mala salud. Los hombres con depresión o ansiedad (especialmente jóvenes) informaron una satisfacción significativamente menor, así como los participantes con peor salud.
Como opinan muchos especialistas en salud sexual, este aspecto debería ser evaluado como rutina en las revisiones médicas generales durante toda la vida de un paciente. Recordemos que la disfunción eréctil, por ejemplo, puede ser indicador de una enfermedad no detectada. Desafortunadamente, a la sexualidad no se le da la importancia que realmente tiene como parte del bienestar integral de los seres humanos.
En México, una encuesta aplicada por el Gabinete de Comunicación Estratégica, revela que 7 de cada 10 mexicanos se sienten satisfechos con sus relaciones sexuales; 24% se otorga una calificación positiva en el desempeño, mientras que 46% piensa que “no tanto”. 2 de cada 100, admiten no sentir satisfacción alguna.
Por otro lado, en la Encuesta Global de Bienestar Sexual patrocinada por condones Durex, (26,032 participantes de 26 países, 1,122 mexicanos), 44% de los participantes declararon estar “totalmente satisfechos” con su vida sexual; entre los mexicanos el indicador fue de 63%.
En lo referente a cuánta excitación les producen sus encuentros íntimos, los mexicanos alcanzaron 73%. Pero no todos los resultados son tan alentadores.
En la encuesta también se incluyeron datos sobre disfunciones sexuales. 24% del total de los hombres, manifestaron tener problemas de erección y 19%, pérdida de apetito sexual.
Comparados con el índice de satisfacción, los números pueden parecer bajos. Pero 43% de hombres con problemas sexuales, son muchos. Se sabe que, a nivel mundial, 52% de los varones entre los 40 y 70 años de edad, padecen algún grado de disfunción eréctil.
La disfunción eréctil en hombres jóvenes
La disfunción eréctil en los hombres más jóvenes se asocia principalmente al estilo de vida y a los malos hábitos como el consumo de alcohol (70%), tabaco (uno de cada cuatro) o drogas recreativas, falta de ejercicio y una alimentación deficiente, así como a problemas psicológicos.
La empresa Pfizer, creadora de la pastilla azul, realizó un estudio sobre la sexualidad de los mexicanos donde se comprobó que:
- 62% de las mujeres considera que un problema como la disfunción eréctil interfiere negativamente en su vida sexual.
- 80% de las mujeres participantes afirmaron que la impotencia sexual masculina daña sus relaciones sexuales; al 63% este problema les genera gran preocupación, para el 61% la disfunción eréctil es motivo de perder la intimidad con su pareja, 56% considera que esta disfunción genera tensión entre ellos y a 51%, les causa insomnio.
La Organización Mundial de la Salud define la salud sexual como “un estado de bienestar físico, emocional, mental y social relacionado con la sexualidad; no es meramente la ausencia de enfermedad, disfunción o debilidad. La salud sexual requiere un acercamiento positivo y respetuoso hacia la sexualidad y las relaciones sexuales, así como la posibilidad de obtener placer y experiencias sexuales seguras, libres de coacción, discriminación y violencia.”
Todos tenemos derecho a una vida sexual plena. Si esto no ocurre, habría que revisar tanto el estado físico como emocional, la situación de pareja y los hábitos que matan el deseo sexual y pueden llegar a causar disfunción eréctil.
El máster en sexología, conferencista y ex-coordinador del equipo de terapia sexual de Boston Medical Group México, Ezequiel López Peralta, proporciona una lista de hábitos que matan el deseo sexual; algunos de ellos, pueden llegar a causar disfunción eréctil si no se modifican a tiempo.
- Mala higiene. “Cualquier tipo de olor desagradable, hace que la pasión muera en el instante. Puede ser debido a la falta de higiene o un problema médico como la halitosis. Estos temas se pueden plantear con la pareja de manera directa o manejarlo de una forma más indirecta. Pero es un tema que hay que resolver porque provoca rechazo y hace muy difícil meterse en la dinámica de la relación sexual.” A veces el olor propio de una pareja puede ser excitante. Sin embargo, sí existe una diferencia cuando el hedor en las axilas, los pies, los genitales o el mal aliento, es producto del descuido. Cuando esto se vuelve un hábito o no se toman cartas en el asunto, lograr una erección o estimular a la pareja, puede volverse imposible.
- Descuido físico. No significa que debas tener un cuerpo perfecto, pero es bueno mantenerse en las mejores condiciones posibles dentro de tu complexión física, afirma López Peralta. Cuida tu alimentación, haz ejercicio, ten una vida saludable, porque eso habla de tu autoestima y de qué tanto te estás preparando para la otra persona. El arreglo en general es algo que tenemos que cuidar -incluida una ropa interior que resulte agradable a tu pareja, tanto mujeres como hombres-. En ellos, es importante el arreglo de las manos y de los pies, las uñas prolijas, la barba, el vello de las orejas y nariz, deben estar bien recortados.
- La presión. No las presiones de la vida diaria, sino concretamente en las prácticas sexuales. “Las presiones y el sexo no van de la mano y algunas de ella rayan en el chantaje emocional. El deseo se estimula, no se presiona. En todo caso, hay cosas que se pueden negociar”, opina el sexólogo. La presión por tener sexo en un momento específico, aunque el otro no tenga ganas o cuando la mujer está ovulando, por tener prácticas sexuales que no agradan a la pareja como el sexo anal u oral, o simplemente “porque hay que cumplir”. A veces no hay deseo y la obligación de tener relaciones sexuales puede provocar que la mecha no se encienda. Si bien ésta no es causa directa de disfunción eréctil orgánica, sí puede llegar a convertirse en impotencia psicológica, ya que genera ansiedad y hasta depresión.
- El celular. El timbre que desconecta el cerebro de los genitales. “En el momento del acto sexual, del acto físico, es muy importante desconectarnos del teléfono. El celular puede ser un verdadero anticonceptivo electrónico.”, afirma este experto. Nunca mejor dicho. Esas notificaciones de mensajes que volteas a ver de inmediato, pasarse horas jugando o mirando las redes sociales en lugar de atender a la persona que está recostada junto a nosotros, mata la pasión y paradójicamente, rompe toda comunicación con la pareja.
Además de los mencionados por López Peralta, otros hábitos que matan el deseo y llegan a causar disfunción eréctil pueden ser:
- Rutina. ¿Quién no se cansa de comer todos los días “pan con lo mismo”? El universo erótico es mucho más grande que la cama o la posición del misionero. El aburrimiento mata el deseo sexual y por supuesto que puede causar disfunción eréctil. La creatividad es fundamental en el sexo. Las relaciones sexuales satisfactorias requieren de cierta variedad, experimentar con cosas nuevas.
- Pornografía. Un poco no le hace daño a nadie y hasta puede ayudar a la excitación. Pero cuando se vuelve un hábito, puede ser causa de disfunción eréctil o eyaculación precoz. El cerebro se acostumbra a la sobreestimulación y cuando se enfrenta con la realidad, llega el desencanto. Los estándares irreales que vemos en los videos eróticos, pueden hacer sentir inseguro a cualquiera. Esta es una de las principales causas de disfunciones sexuales entre los jóvenes.
- Cenas copiosas. Dicen por ahí que se debe “desayunar como rey, comer como príncipe y cenar como mendigo”. Bueno, no necesariamente, pero evitar las cenas abundantes y pesadas puede mejorar el rendimiento. Cuando cenas muy tarde o inmediatamente antes de irte a la cama, es probable que te gane el sueño. Además, el flujo de sangre irá a la digestión y no al pene. Cena ligero, así tendrás mucha más energía para el encuentro sexual.
- Una cama para todo. El espacio destinado a las relaciones sexuales debe ser agradable, invitar a la relajación y ser totalmente privado. Pero muchas parejas acostumbran usar la cama para trabajar, cenar, jugar con los niños, dormir a las mascotas o hasta para dejar la ropa sucia. Una habitación desordenada, con olor a comida o a perro y un cubrecama lleno de pelos, puede apagar hasta al más prendido. Tu habitación es un santuario para el amor y el descanso, no lo invadas con todo aquello que arruine una experiencia sexual satisfactoria.
- Olvidar el romance. Cuando se llevan muchos años en pareja, hay cosas que se dan por sentadas. Entrar directamente al coito no le ayuda a nadie a disfrutar. Las caricias previas, un ambiente acogedor, los besos o una conversación sobre sus fantasías eróticas, pueden ser una magnífica antesala para elevar el nivel de excitación. Hacer que la otra persona se sienta apreciada y atractiva, producirá una mejor respuesta a los estímulos.
- Llevarse los problemas a la cama. A veces, las parejas aprovechan la hora de meterse a la cama para resolver pendientes de la casa. Los problemas con los hijos, los temas económicos, el estrés laboral, los quehaceres domésticos o hasta los reclamos guardados, no excitan a nadie. Está bien comunicarse con la pareja, pero procuren hacerlo a la hora de la cena o por la tarde. El trabajo y la familia pueden generar mucho estrés y está bien buscar juntos la forma de resolverlo, pero no es buena idea desperdiciar nuestra última energía del día en el conflicto.
Consideraciones finales
Las disfunciones sexuales como la ausencia de deseo o la disfunción eréctil, pueden ser de origen físico; esto se resuelve acudiendo al médico, tomado tratamiento, dejando los malos hábitos como fumar o beber alcohol, manteniendo un peso corporal adecuado y haciendo ejercicio, entre otras medidas.
Pero, muchas veces, los hábitos de vida terminan limitando la cantidad y calidad de las relaciones sexuales. Es posible que esto nos haga rechazar el contacto íntimo por largo tiempo.
Cambiar los hábitos que matan el deseo sexual y pueden llegar a causar disfunción eréctil, es posible con voluntad y la ayuda de un terapeuta sexual.
Si necesitas ayuda no dudes en solicitar asesoría experta en el tema, podemos ayudarte con mucho gusto. Clic aquí.
¡Hasta pronto!
Artículo avalado por Héctor Corredor, Médico Cirujano especialista en Urología con Maestría en Sexología Clínica, Director médico internacional en Boston Medical Group.
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