El sexo anal no sólo es una práctica de homosexuales o bisexuales, de hecho, es cada vez más común en las parejas heterosexuales. Aun así, sigue siendo un tabú. La estimulación anal puede ser sumamente placentera tanto para hombres como para mujeres, pero no está exenta de riesgos. Con información de los expertos de Boston Medical Group, en este caso de la sucursal en México, trataremos de despejar algunas de las inquietudes de los consultantes: ¿el sexo anal genera eyaculación precoz?, ¿qué trastornos puede ocasionar el sexo anal?, ¿qué enfermedades puede causar? ¡Estas respuestas y mucha información más sobre el tema podrás conocer en el artículo de hoy! ¿Nos acompañas?
Algunas consideraciones
Ezequiel López Peralta, psicólogo y sexólogo clínico de Boston Medical Group, plantea que
“lo más importante en el sexo anal es que sea consensuado. De nada sirve que una persona lo disfrute y la otra lo sufra. Lo más importante es que ambas partes estén de acuerdo y se tomen las precauciones necesarias para que ninguno salga lastimado. No te dejes llevar por las presiones de tu pareja. Si crees que no te va a gustar, no lo hagas”.
Debemos dejar de ver el sexo anal como una especie de perversión. Para nada es así. Recordemos que el universo erótico es muy amplio y todo aquello que nos brinde un placer extra, es válido si ambas partes consienten en experimentarlo.
Muchas parejas practican la estimulación del ano en su vida sexual e incluso, lo utilizan como método anticonceptivo. Sin embargo, las relaciones sexuales anales pueden generar algunos problemas de salud que se reducen potencialmente tomando precauciones como el uso de condón y la lubricación artificial.
La primera cosa que debes tener en cuenta, es que la mucosa ano-rectal es muy sensible, además de una zona propensa a infecciones. La penetración fuerte por el ano genera mayor fricción, lo que puede provocar fisuras, hemorragias o lesiones graves como irritación, abscesos o empeoramiento de la sintomatología de un problema de hemorroides.
¿Qué trastornos puede producir el sexo anal en las relaciones sexuales?
En principio, dolor, ya sea durante o posterior a la penetración, especialmente si esto no se ha practicado antes; contagio de enfermedades de transmisión sexual (ETS), el riesgo se incrementa si hay lesiones sangrantes; también se pueden transmitir otras enfermedades como hepatitis, verrugas o virus de papiloma humano (VPH) que derive en cáncer rectal si no se atiende.
Otras afectaciones pueden ser lesiones en la piel (desgarros) o dilatación excesiva que posteriormente ocasione incontinencia o prolapso rectal: el recto se estira y sobresale desde el ano, es decir, una parte de la sección inferior del intestino grueso (el recto) se desliza hacia afuera de la abertura muscular que está al final del aparato digestivo (el ano).
Un dato que siempre se debe tener presente, es que el ano es el orificio por el cual se expulsan las heces fecales. Si no existe una buena higiene, todas las bacterias acumuladas ahí, podrían contaminar no sólo al pene o la uretra, sino otras zonas del cuerpo como son la boca o la vagina, si es que durante el acto sexual hay penetración en todos estos lugares. Esto puede evitarse aseando perfectamente el ano y el pene antes de la penetración y desde luego, usando preservativo.
En cuanto a las enfermedades que el sexo anal puede causar, hay un gran listado de ETS y otras patologías que vale la pena explicar a detalle. Cabe aclarar que estas enfermedades no sólo se contagian por vía anal, pero el riesgo se incrementa al ser una parte del cuerpo sensible a desgarros y donde los fluidos infectados pueden absorberse más fácilmente por la piel expuesta.
Cuando se practica el sexo anal, la persona debe estar más atenta y acudir con mayor frecuencia a revisiones médicas, incluida una exploración por parte del proctólogo y exámenes de sangre para detectar concretamente ETS, ya que muchas de éstas no presentan síntomas o no muestran signos visibles a corto plazo; tal es el caso del VHI, VPH, herpes genital, clamidia, tricomoniasis, gonorrea o sífilis.
Vemos cada una de estas enfermedades de transmisión sexual
1.Virus de Inmunodeficiencia Humana o VIH. El sexo anal es la vía de contagio más frecuente, en especial en hombres que tienen sexo con hombres; con mujeres, puede transmitirse por vía rectal o vaginal si no se usa preservativo, lo mismo pasa a través del sexo oral.
2.Virus del Papiloma Humano o VPH. Este virus entra con especial fuerza por las mucosas anogenitales, ya que se extiende fácilmente con el contacto de piel a piel. También puede atacar la boca, vulva y aparato reproductor femenino. Se manifiesta con verrugas o lesiones que pueden degenerar en cáncer (ano, genital, cervicouterino u oral). Es importante el realizar un examen en ambos miembros de la pareja de la región de la piel perianal y del canal anal. En caso de detectar dichas lesiones, se debe acudir a un especialista para un tratamiento inmediato. Es importante advertir que el condón sólo protege del contagio en un 70%.
3.Herpes genital. Este virus puede extenderse a la boca a través del sexo oral. En ocasiones, los signos de estas enfermedades por sexo anal surgen años después de contraída la infección. Este tipo de herpes provoca úlceras en el pene, la vagina o la región perianal bastante dolorosas. Como todos los virus, permanece en el cuerpo siempre, por lo que es posible que las úlceras vuelvan a aparecer en algún momento donde las defensas se encuentren bajas.
4.Clamidia. Es la enfermedad bacteriológica más común y puede contagiarse mediante sexo oral, vaginal o anal, incluso al compartir juguetes eróticos. Suele curarse con antibióticos, pero lo ideal es prevenir usando preservativo. Si no se diagnostica rápido, puede derivar en enfermedad inflamatoria pélvica (EIP).
5.Gonorrea. Es una infección bacteriológica que puede afectar la uretra, cuello uterino, recto, ano y/o garganta. Es una de las enfermedades por sexo anal más recurrentes y sus manifestaciones aparecen desde el día siguiente hasta dos semanas posteriores a la práctica sexual. Puede ser asintomática o presentar signos como ardor al orinar, líquido blanquecino o amarillento que sale del pene, flujo vaginal amarillento, irritación o flujo del ano y faringitis resistente al tratamiento convencional. Se cura fácilmente con antibióticos. Pero, si no se aplica tratamiento alguno, la gonorrea puede transformarse en enfermedad inflamatoria pélvica.
6.Enfermedad inflamatoria pélvica. Se reconoce por dolor en el bajo abdomen y fiebre con flujo mal oliente por infección e inflamación en útero, trompas de Falopio, ovarios y estructuras adyacentes. Sus secuelas pueden ser severas, como la esterilidad tanto femenina como masculina. Se trata generalmente con antibióticos, pero en casos graves, puede requerir cirugía urgente.
7.Proctitis infecciosa. Inflamación severa de la membrana mucosa del recto con fiebre, dolor en el bajo abdomen y diarreas con sangre o leucocitos. Se origina por complicaciones de clamidia y gonorrea. En ocasiones pueden aparecer masas al tacto rectal confundibles con cáncer de recto. El tratamiento es con base en antibióticos.
Otros trastornos del sexo anal
Esto puede sonar raro, pero seguro lo has visto en alguna serie de emergencias médicas o en programas de noticias amarillistas. Se llama masturbación anal.
Introducir un objeto en el interior del ano implica ciertos peligros. Independientemente de la sensibilidad de la zona, las paredes intestinales no causan dolor cuándo se introducen objetos. Esto, sumado a la presión ejercida por el mismo ano, puede ocasionar que los objetos se introduzcan demasiado y no se puedan volver a sacar o aún peor, perforen el recto o el colon, lo cual requiere una cirugía de emergencia para extraer el objeto y resanar la zona perforada. En casos muy graves, podría terminar en una colostomía temporal. La recomendación es no introducir objetos en el ano que no están diseñados con ese fin.
1.Problemas inmunológicos. El sexo anal afecta el sistema inmunológico, aunque no este presente el SIDA. Durante el acto, debido al daño que se produce en la pared del recto, los espermatozoides penetran en la mucosa rectal y de ahí al sistema circulatorio. Cuando esto ocurre repetidas veces, se desarrollan anticuerpos a los espermatozoides, lo que podría trastornar el sistema inmunológico, con la consecuente debilitación de todo el organismo.
2.Anodispareunia (dolor). El ano y las zonas que lo rodean tienen una gran concentración de terminaciones nerviosas, por eso la penetración puede resultar muy placentera, pero también dolorosa. El esfínter anal (músculo encargado de mantener la continencia a gases y heces) está habitualmente cerrado, forzarlo a abrirse por el sexo anal, puede causar daño si no se dilata previamente. Sería recomendable estimular el ano mediante algún juego preliminar, masaje o presión sobre el músculo. Muchas personas utilizan para este fin los famosos poppers, un líquido que provoca la relajación del ano de manera sencilla y que no conlleva dolor ni molestias. Se trata de sustancias como nitrato amílico, isobutílico o butílico, que en su inhalación inducen a la dilatación de los vasos sanguíneos, un latido más acelerado del corazón y que la sangre se dirija al cerebro. Es importante considerar los efectos secundarios de los poppers: baja súbita de la presión arterial, mareos, palidez, vértigo, disfunción eréctil transitoria, irritación o quemaduras al rozar la piel y en casos de excesiva concentración, podrían ser causa de muerte. Se advierte también la contraindicación a personas de alto riesgo como aquellos con problemas de corazón, anemia, glaucoma (elevada presión ocular) o con alteraciones en la tensión arterial.
3.Absceso anal. Acumulación de pus en la región perianal, a modo de tumoración dolorosa, caliente y enrojecida, por lo general acompañada con fiebre y malestar general, debido a infección de las glándulas anales. Requiere atención médica urgente.
4.Fístula anal. Se trata de una comunicación -a modo de túnel- entre el canal anal y la piel perianal, generalmente consecuencia de un absceso anal. Produce la salida de pus, sangre o heces por la piel perianal, con ensuciamiento de la ropa interior asociado a dolor, picazón, molestias y olor desagradable.
5.Estenosis anal. Estrechez del canal anal o del recto tras la cicatrización de reiterados traumatismos o después de una proctitis (inflamación del recto), secundaria a una infección de transmisión sexual.
6.Incontinencia fecal. Tras sucesivos traumatismos, se producen desgarros de las fibras musculares que rodean al ano (esfínteres anales), lo que provoca la imposibilidad de retener gases y/o heces. Sobra decir la gravedad de la afectación en la calidad de vida y en la de salud psicosocial.
¿El sexo anal genera eyaculación precoz?
Es una pregunta frecuente que no tiene una respuesta exacta. Digamos que el sexo anal no tiene una relación causa-efecto con la eyaculación precoz. Sin embargo, es factible que los hombres que realizan esta práctica frecuentemente, se acostumbren a un mayor nivel de estimulación generado por la fricción y la presión que ejerce una zona tan cerrada como el ano, en el pene. Esto puede elevar el nivel de excitación a tal grado, que se pierde el control de la eyaculación, más aún si se utilizan los mencionados poppers.
El hombre puede sentir más placer por estas razones, pero también, como explica el sexólogo Ezequiel López Peralta, “hay un poco de morbo en el dolor que se pudiera generar sobre la pareja durante la penetración, algo un poco sádico y masoquista del otro lado, que puede ser excitante para muchas personas”; esto, sumado al concepto de “lo prohibido”, es un cóctel de estímulos que pueden llevar a la eyaculación prematura.
Si se sospecha de tener un problema de eyaculación precoz, siempre es recomendable evitar este tipo de prácticas u otras que puedan resultar demasiado excitantes, al menos mientras se acude a tratamiento. La asesoría sexológica es lo indicado para solucionar esta condición de manera definitiva. El tratamiento integral de Boston Medical Group México ha demostrado excelentes resultados en cientos de pacientes, y una vez superada la eyaculación precoz, rara vez vuelve a presentarse.
Esperamos haber resuelto tus dudas sobre qué trastornos o enfermedades puede ocasionar el sexo anal. Por último, queremos dejarte algunos consejos provenientes de médicos expertos en salud sexual masculina, que te serán útiles en caso de que el sexo anal sea algo que practiques de forma recurrente o que quieras experimentar por primera vez.
1.Higiene. Es necesario mantener el máximo nivel de higiene en el recto y en el ano antes de efectuar la penetración. Conviene que el recto se haya vaciado previamente con un enema y que la buena higiene también se realice en el pene y/o en los juguetes sexuales.
2.Usa condón. Aún cuando se trate de tu pareja habitual de mucho tiempo, en el sexo anal es imprescindible el uso del condón, por todo lo que ya explicamos.
3.Evita la penetración vaginal o sexo oral inmediatamente después del sexo anal. Recuerda que en el ano proliferan muchas bacterias fecales que no querrás llevarte a la boca o introducir en tu vagina. Pide que se lave bien el pene antes de tocar otras áreas.
4.Siempre usa lubricante. Los hay específicos para facilitar la penetración anal y evitar el dolor y las lesiones. Elige los lubricantes a base de agua, ya que los de aceite u otros productos caseros (como aceite de bebé o comestible) pueden dañar el condón y causar irritación o alergias en la piel. Lubrica antes el ano y recto con una ligera estimulación con el dedo, para dilatar antes de penetrar.
Sigue estas recomendaciones, explora tu universo erótico y como decimos siempre: relájate y disfruta, pero siempre ¡cuídate!
¡Hasta pronto!
Artículo avalado por Héctor Corredor, Médico Cirujano especialista en Urología con Maestría en Sexología Clínica, Director médico internacional en Boston Medical Group.
¿Quieres saber si tu vida sexual es satisfactoria?
Descubrelo con el siguiente test.
¡Conoce la respuesta en 2 minutos y resuelve tus dudas!
¿Necesitas ayuda?
Somos pioneros en ofrecer tratamientos para mejorar la salud sexual del hombre.
¡Resuelve tus dudas contactándote con nosotros totalmente gratis!
¡Da el paso más importante: el de tener una vida sexual plena!