¿Necesitas ayuda? Podemos ayudarte

Problemas de erección a los 30 años en homosexuales y bisexuales

Teóricamente, los problemas de erección a los 30 no tienen un origen distinto en hombres homosexuales o heterosexuales; decimos “teóricamente”, porque las prácticas sexuales de unos y otros sí, pueden llegar a influir en el tipo de tratamiento. La disfunción eréctil en homosexuales y bisexuales, comprende aspectos que es necesario tomar en cuenta para un diagnóstico acertado. Aproximadamente 40% de los médicos opina que la orientación sexual del paciente, no es algo relevante para tratar una disfunción sexual, pero la etapa de vida en la que se encuentra la persona, sí está estrechamente ligada a los problemas de erección a los 30. 

La lectura del día está por comenzar, quedas invitado a continuar atento a lo que sigue, porque sabemos que te va a interesar mucho.

Problemas de erección

Los especialistas en salud sexual masculina, son muy conscientes de que nunca un paciente será igual al otro y que cuando se trata de padecimientos como los problemas de erección, no existen las generalidades.

Hablando de problemas de salud sexual, ¿por qué afirmamos que este sector de la población tiene necesidades diferentes a las de las personas heterosexuales? Básicamente porque sus hábitos sexuales son diferentes. Pensemos, por ejemplo, en las enfermedades de transmisión sexual (ETS). Éstas podrían causar lesiones en el recto. Si el médico no pregunta y asume que el paciente es heterosexual, podría no tomar en cuenta esta zona en la revisión. O pensemos en un paciente bisexual con disfunción eréctil de grado leve a moderado. Él tal vez pueda lograr la penetración vaginal con una erección medianamente firme; pero la penetración anal, es prácticamente imposible, ya que se requiere de mayor rigidez. 

Esperemos que estas breves explicaciones sirvan para comprender por qué los problemas de erección a los 30 en homosexuales y bisexuales, deben abordarse de forma personalizada.

Afortunadamente, hoy en día existe mayor apertura para aceptar las diferencias y se ha avanzado mucho en la defensa de los derechos de la población LGBT. Sin embargo, en el campo médico, aún hay muchas antiguas costumbres y cabos sueltos.

Tanto pacientes como médicos, todavía son reacios a hablar con naturalidad de prácticas sexuales entre hombres. El miedo a la discriminación podría ser un factor. En el caso de los varones bisexuales o que han tenido encuentros fortuitos con otros hombres, es más difícil que expongan este tema ante el médico, por temor a ser juzgados o porque no lo consideran trascendente. De por sí los hombres en general tardan en promedio 4 años en buscar tratamiento por negación, temor o vergüenza de presentarse ante un desconocido (el médico) a abrir de capa su vida íntima. Si a esto sumamos el temor a la homofobia -porque seamos honestos, incluso entre los médicos, pueden existir prejuicios-, los pacientes homosexuales o bisexuales podrían sentir que tienen menos opciones para encontrar ayuda.

Recordemos que el 90% de los casos de disfunción eréctil es de causas fisiológicas: sobrepeso, problemas cardiovasculares, enfermedades preexistentes como diabetes, colesterol alto, hipertensión, lesiones en la médula espinal, el consumo de drogas recreativas, alcohol, tabaquismo o algunos medicamentos para tratar la depresión.

En este sentido, no hay diferencia alguna. Los hombres que mantienen relaciones sólo con mujeres o los que practican el sexo con varones, tienen las mismas probabilidades de padecer problemas de erección.  

Hay datos científicos que apuntan a:

  • Los problemas de erección a los 30, pueden radicar más en el estilo de vida o en factores psicológicos.
  • Los hombres jóvenes, si bien están más abiertos a exponer sus problemas sexuales, también son más proclives a verlos como algo pasajero. “Soy joven, esto no es un problema de salud.”
  • A esa edad, las relaciones de pareja no son muy estables, es decir, los hombres de 30 aún no están casados o en una relación monógama. Los cambios de pareja pueden ser un factor de incidencia en los problemas de erección. Esto se acentúa más en pacientes bisexuales.
  • Con base en esto, podríamos inferir que los problemas de erección a los 30, deben ser tratados más desde disciplinas como la psicología, la asesoría sexológica o incluso la nutrición o la terapia para tratar adicciones (drogas, tabaco, alcohol). Esto una vez descartadas las causas físicas.

No se malinterprete tal afirmación. Ser homosexual no es un factor de riesgo para la disfunción eréctil, nos referimos a la población joven en general. La generación YOLO (you only live once) está expuesta a otros factores de riesgo para los problemas de erección, que los hombres de 50 o 60. En el caso de los varones homosexuales jóvenes, habrá que añadir el tema de la no aceptación.

Cuando se trata de emociones humanas, el tema se vuelve complejo, ya que las variables son muchas y menos evidentes. Habrá que indagar si el problema se debe, por ejemplo, a un evento traumático en la infancia, al miedo al rechazo, el temor a “no dar el ancho”, estrés, ansiedad o bien, a la falta de aceptación propia de las preferencias homosexuales. En estos casos, es un psicólogo especializado en sexología, quien puede ayudar al paciente a encontrar la punta de la madeja.

Según Héctor Corredor, Médico Cirujano especialista en Urología con Maestría en Sexología Clínica, Director médico internacional en Boston Medical Group,

“la depresión, la ansiedad y el abuso de sustancias son factores psicológicos asociados significativamente a la disfunción sexual en los hombres que tienen sexo con hombres.”

Esto se ha demostrado en algunos estudios y podría deberse a que son un sector de la población con una larga historia de discriminación y rechazo.

Algunos hombres homosexuales o bisexuales, eligen mantener sus preferencias en secreto, debido a que han recibido una educación moral muy estricta que los llena de culpa, ansiedad y miedo. Esto los vuelve más proclives a padecer disfunción eréctil psicológica.

Pese a los avances en materia de derechos de la comunidad LGBT, aún hace falta mucha información y cultura “de la aceptación”. Las preferencias sexuales no tienen nada que ver con la “hombría”. No se es menos hombre por tener sexo con otros varones. Sin embargo, el pertenecer a un grupo que ha sido históricamente marginado, que ha tenido que luchar para que se reconozcan sus derechos y que ha sido violentado sólo por sus preferencias, puede ser la causa de que estos hombres tengan una mayor tendencia a la depresión o una baja autoestima.

Problemas de erección a los 30, causas

Una vez establecidas las posibles diferencias entre hombres homosexuales y heterosexuales, podríamos resumir las principales causas de los problemas de erección en hombres jóvenes homosexuales de esta forma:

  • Estilo de vida. Mala alimentación, pocas horas de sueño, altos niveles de estrés, falta de ejercicio, sexo sin protección. Todos enemigos de la salud sexual. 
  • Automedicación. Tomar medicamentos de prescripción o suplementos “naturales” para mejorar el desempeño sexual sin la supervisión de un médico, puede tener graves consecuencias no sólo en la funcionalidad de los genitales, sino en todo el organismo. Los medicamentos orales vasodilatadores como el Viagra, se han popularizado entre los jóvenes que, sin tener problemas de erección, lo consumen para “dar el rendimiento” por largas horas. No hay estudios científicos para conocer los efectos de estas sustancias en personas sanas. Lo que sí se sabe, es que puede crear dependencia psicológica y daños en el sistema cardiovascular a largo plazo.
  • Consumo de sustancias nocivas. El alcohol, el tabaco y las drogas recreativas van directamente al cerebro, las arterias y el corazón, justo los órganos de los que dependen las erecciones.
  • Antidepresivos. Pregunta a tu médico si tu medicamento puede causar disfunción eréctil. Si es así, pídele que te ofrezca otras alternativas, pero no lo abandones por cuenta propia.
  • Adicción a la pornografía. Nada con exceso, todo con medida, especialmente si altera nuestra percepción de la realidad.
  • Falta de estabilidad emocional, ya sea por la edad o la aceptación de las preferencias sexuales.
  • Enfermedades de transmisión sexual. Si bien las ETS no causan disfunción eréctil de forma directa, sí pueden provocar la ausencia de deseo (por miedo a los contagios) o bien, por los malestares y efectos de la salud en general. Practica sexo seguro. 

Enfermedades de transmisión sexual

Ya que hablamos de ese tema, vale la pena explicar un poco qué tipo de cuidados deben tener los hombres homosexuales y bisexuales a este respecto.

Los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres corren un mayor riesgo de contraer VIH u otras infecciones de transmisión sexual. Como medidas preventivas, los proveedores de salud sexual masculina, aconsejan:

  • Usa preservativo u otra forma de protección. Usa un preservativo nuevo cada vez que tengas relaciones sexuales, en especial durante el sexo anal, pero lo ideal sería que también lo utilices durante el sexo oral. Usa sólo lubricantes a base de agua, no a base de vaselina, crema ni aceites para el cuerpo. Los lubricantes a base de aceite pueden debilitar los preservativos de látex y hacer que se rompan.
  • Practica la monogamia en la medida de lo posible. Permanecer en una relación a largo plazo con una pareja no infectada y donde ambos miembros son monógamos, reduce las probabilidades de contagio.
  • No incurras en prácticas de riesgo. Limita la cantidad de alcohol y evita el uso de drogas recreativas. Estas sustancias nos hacen perder el juicio y el control sobre nuestros actos. No quiere decir que no te diviertas, pero si estás bajo la influencia del alcohol o las drogas, es más probable que corras riesgos sexuales. 
  • Vacúnate. Las vacunas pueden protegerte de la hepatitis tipo A y B, que se transmiten por contacto sexual. Sin embargo, no todas las infecciones de transmisión sexual se previenen mediante vacunas. La hepatitis C no está cubierta por ninguna vacuna y puede causar insuficiencia hepática, cáncer de hígado y la muerte. La vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH) sólo está disponible para hombres de hasta 26 años de edad. Pregunta a tu médico sobre esta vacuna, ya que el VPH está directamente asociado al cáncer anal, uretral y de garganta.
  • Hazte análisis y pídele a tu pareja que se los haga. No tengas relaciones sexuales sin protección, a menos que tengas la certeza de que tu pareja no está infectada de VIH u otra ETS. Hacerse las pruebas es importante porque muchas personas no saben que están infectadas o podrían no ser honestas sobre su salud.

Consideraciones finales

En resumen, podemos decir que los problemas de erección a los 30 años en homosexuales y bisexuales, en buena parte son producto de los tiempos que vivimos. La constante exposición a estímulos, la presión social, la necesidad de aprobación, la falta de estabilidad en sus relaciones, un estilo de vida sin preocuparse por las consecuencias a futuro y la discriminación, son todos aspectos que pueden afectar el estado emocional de las personas y con ello, su vida sexual. 

Pero los jóvenes también son una generación que se adapta fácilmente al cambio. De hecho, son los impulsores de éste. Ellos se preocupan más por el medio ambiente, por los derechos humanos, la sustentabilidad, la educación y la salud. Estas características pueden ser las que los salven de ser una generación de impotentes.

Habla con tu médico o el psicólogo. Si aún él no sabe que eres gay, debes informarle para que te proporcione la orientación y el cuidado que necesitas. Un verdadero profesional no te juzgará. Si crees que él no es la persona adecuada, busca otro. 

Todos tenemos derecho a disfrutar de nuestra sexualidad. No importa si llevas mucho tiempo con una misma pareja, si vives el sexo sin compromisos, si eres joven o si te gustan los hombres. Todos podemos enfrentar alguna vez problemas de salud sexual y los expertos están para ayudarte a manejar cualquier situación y encontrar la mejor forma de abordarlo. 

Cada persona es única, tiene su propio universo erótico y puede vivirlo de la manera que le plazca. Pero para eso, es necesario estar sano.

Para dar el primer paso, te invitamos a realizar el test online y gratuito sobre disfunción eréctil y eyaculación precoz que encontrarás al finalizar este artículo. Será un primer diagnóstico que, estamos seguros, te resultará muy útil. 

¡Hasta la próxima entrega!

Artículo validado por Juan Manuel Martinez Preciado, Médico Cirujano con Maestría en Sexología clínica, integrante del grupo de dirección médica internacional Boston Medical Group.

¿Crees que tienes disfunción eréctil?

Descubre si puedes estar teniendo disfunción eréctil con este test

Nuestra prueba diagnóstica está basada en los test de los índices urológicos internacionales

¡Conoce la respuesta en 2 minutos y resuelve tus dudas!

¿Necesitas ayuda?

Somos pioneros en ofrecer tratamientos para mejorar la salud sexual del hombre.

¡Resuelve tus dudas contactándote con nosotros totalmente gratis!

¡Da el paso más importante: el de tener una vida sexual plena!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

SALUD MASCULINA

¿Sabías que puedes conocer, ahora, si padeces alguna patología sexual masculina?

Realiza nuestro test y descubre la respuesta

Salir de la versión móvil