Hablemos de la próstata

La próstata es una glándula del tamaño de una nuez. Forma parte del sistema reproductor masculino y se ubica entre la vejiga y el pene, delante del recto.

En el artículo de hoy hablaremos sobre la próstata, conocerás cuál es su función y qué es el orgasmo prostático. ¿Nos acompañas?

¿Cuál es la función de la próstata?

Su función más conocida es la producción de un líquido que, junto a los espermatozoides que le llegan desde los testículos y los fluidos de otras glándulas, constituye el semen. 

Los músculos de la próstata también se encargan de que el semen entre en la uretra y desde allí, ser expulsado con fuerza durante la eyaculación.

La palabra “próstata” procede del griego, significa “el que está delante”, ya que describe la posición de esta glándula: delante de la vejiga.

Pero lo que nos interesa en este artículo, es que ese diminuto órgano es capaz -si hallamos la manera de estimularlo- de proporcionarnos un placer inversamente proporcional a su tamaño.

Tocar la próstata -por encima de los músculos del suelo pélvico- sólo es posible a través del recto, única vía para palpar directamente y “ordeñar” la próstata.

Ordeñar la próstata significa masajearla hasta que produce un líquido ralo y lechoso llamado líquido prostático. El término se refiere a la estimulación de la próstata para el placer sexual.

Si pudieras verla, “parece una bolita con alas, algo así como la famosa bola con alas de la película de Harry Potter (Snitch)”, explica el doctor Charlie Glickman, entrenador sexual y de relaciones. Al tacto, dice, se siente como una ciruela madura, firme pero ligeramente blanda.

Y he aquí un dato sorprendente: las mujeres tienen un equivalente llamado glándulas de Skene, también denominadas glándulas periuretrales o parauretrales. Están localizadas a ambos lados de la uretra y son homólogas a la próstata de los hombres.

Su secreción contiene creatinina, la misma enzima fosfatasa ácida prostática, la proteína del antígeno prostático específico, glucosa y fructosa. Esta composición sugiere que ayuda a la nutrición de los espermatozoides y, por tanto, a facilitar la fecundación. 

¿Qué dicen los estudios?

Una investigación de 2011 publicada en Journal of Sexual Medicine informa que, al analizar las expulsiones de una mujer de 43 años durante un orgasmo, se observó que el líquido abundante y transparente de la expulsión violenta, contenía urea, ácido úrico y creatinina, lo cual indica que este fluido es orina proveniente de la vejiga, expulsada por la relajación del esfínter urinario.

Por otro lado, una segunda sustancia, más traslúcida y espesa, era de composición similar a la que produce la próstata: la llamada eyaculación femenina. Su cantidad es reducida. 

Lo anterior da lugar a que la próstata también sea llamada como el punto G masculino o punto P, pues con un tipo de estimulación concreta, produce orgasmos sumamente intensos.

Puedes leer más aquí: El punto G en los hombres: descubre dónde se encuentra y cómo estimularlo

Lo anterior no significa que debamos acudir con miedo de “volvernos locos de placer” durante una prueba de tacto rectal, en la cual el médico introduce un “dedo enguantado y lubricado” en el recto para palpar la próstata en busca de cualquier anomalía.

El tacto rectal no es un “masaje prostático”, sino una leve presión que sólo dura unos segundos. 

Hay que considerar también que, cuando se explora la próstata en busca de placer, el objetivo es a pasar un buen rato.

El urólogo Dudley Danoff, autor de “La guía definitiva de la salud sexual masculina”, asegura que nunca ha sido testigo ni ha escuchado jamás de un hombre que haya eyaculado durante un examen de próstata. Así que, si tu temor es que te acabe gustando, despreocúpate. No va a pasar.

Si estás abierto a experimentar y buscar en tu próstata el “tesoro escondido”, existen diferentes maneras de hacerlo… 

Para explorar

Puedes empezar explorando la próstata por fuera, de forma indirecta, a través del perineo, la piel de textura más rugosa que va desde abajo del escroto hasta el ano.

Es posible que te cueste localizarla desde el perineo y que, incluso, sientas ganas de orinar. Un tip para encontrarla desde afuera, es esperar a estar muy excitado; la excitación hace que la glándula se hinche y sea más fácil dar con ella. 

Desde el interior, es decir, desde el recto, entrando por el ano, se siente como un bulbo carnoso de tejido en la pared frontal del revestimiento rectal; diferente al resto.

El punto G

La próstata se encuentra a unas 2 pulgadas dentro del recto (más o menos hasta el primer nudillo si tus dedos son de una longitud promedio). Esta es la forma más directa e intensa de llegar al punto G del hombre.

Muy importante: usa mucho lubricante, procura tener las uñas cortas y tomar todas las precauciones necesarias para no lastimarte o lastimar a tu pareja. Con suerte, experimentarás un orgasmo muy intenso que les abrirá la puerta a un mayor disfrute de la relación sexual.

¿Por qué decimos, “con suerte”? La investigación clínica real sobre los orgasmos prostáticos es muy escasa. No sabemos en qué porcentaje ocurre o si es posible que todas las personas con próstata lo experimenten. Si quieres ampliar el tema de los orgasmos masculinos sigue este enlace: Los dos tipos de orgasmo que tienen los hombres

Conclusiones

Dicen los que han probado, que el orgasmo prostático, el del punto “P”, es parecido a los que conseguimos a través del pene, pero más intenso y se siente en todo el cuerpo. 

Recuerda que cada cuerpo es diferente, así que será necesario experimentar para saber si te gusta. Si consigues tener uno, reproducirlo debería de resultar mucho más fácil una vez que conoces el camino. Si lo consigues, comparte este blog con tus amigos o mejor aún, escríbenos para contarnos. 

¡Hasta pronto!

Artículo validado por Juan Manuel Martinez Preciado, Médico Cirujano con Maestría en Sexología clínica, epidemiólogo, integrante del grupo de dirección médica internacional Boston Medical Group.