Espermarquia ¿Qué hacer cuando tu hijo eyacula por primera vez?

Se llama espermarquia a la primera eyaculación del varón. Suele ocurrir entre los 12 y los 14 años, aunque a algunos niños puede pasarles más temprano o más tarde. La adolescencia es una etapa difícil, por eso es necesario informar a los jóvenes de todos los temas, especialmente de sexualidad. Cuando la espermarquia aparece, los adolescentes deben estar ya enterados. Hablar con ellos antes de que comiencen su vida sexual, es importante.

Por eso, en el artículo de hoy abordaremos el tema: “Espermarquia ¿Qué hacer cuando tu hijo eyacula por primera vez?” ¡Acompáñanos si es de tu interés!

¿Cómo explicar a los chicos lo que ocurre en su cuerpo con la espermarquia?

Existe un libro editado por Pol·len Edicions y escrito por Julia Sánchez Andreo: “Espermarquia. Un cuento sobre los cambios en la pubertad, las eyaculaciones y el buen trato.” en la sinopsis, se explica que “Juan está acabando la pubertad y se aproxima la vivencia de su primera eyaculación, la espermarquia. Su fertilidad está floreciendo y siente curiosidad y ganas de eyacular por primera vez…él irá notando cómo se despide de su cuerpo de niño y le aparecen un montón de dudas.” 

Este es sólo un ejemplo de cómo explicar a los chicos lo que ocurrirá en su cuerpo, en sus emociones, de qué se trata eso del sexo y las repercusiones que puede tener en su vida el desconocer estos temas, así como la forma de cuidarse.

Al llegar a la adolescencia, los cuestionamientos se tornan más complejos, especialmente en temas relacionados con el sexo. Abordar estos tópicos se hace complicado no sólo porque los padres debemos saber, al menos, lo elemental de anatomía, medicina y sexualidad; sino porque el sexo es un asunto que a los mismos adultos, nos incomoda.

El portal Nemours KidsHealth, una de las fuentes más confiables de información y consejos revisados ​​por médicos sobre la salud de los niños y problemas de crianza, explica de forma muy sencilla lo que ocurre con las primeras erecciones.

Las erecciones

Como sabemos, una erección ocurre cuando el pene se llena de sangre y se pone rígido a partir de un estímulo físico o imaginario (excitación). Al llegar a la pubertad, los chicos notarán que las erecciones ocurren más seguido. 

Las erecciones pueden producirse en cualquier momento, pero muy frecuentemente, ocurren durante el sueño. Es posible que el joven despierte con la ropa interior o la cama mojadas. 

Esto puede significar que la espermarquia ha llegado con una polución nocturna o “sueño húmedo”, es decir, el semen es expulsado mientras el niño duerme.

¿Cuándo ocurre la espermarquia?

La espermarquia ocurre porque el organismo y sistema endocrino del joven, empieza a producir más testosterona. Es el equivalente de la menarca o primera menstruación en las niñas. 

La espermarquia es una señal de que el cuerpo se prepara para la reproducción en el futuro. El semen, que contiene esperma, podrá fertilizar el óvulo de una mujer.

Explica Nemours KidsHealth que “algunos niños podrían sentirse avergonzados o incluso culpables por tener sueños húmedos.” Sin embargo, este no debe ser motivo de vergüenza, ya que es absolutamente normal. 

Es aquí donde los padres deben estar preparados para explicar, de forma clara y acorde a la edad del chico, que esto no tiene nada de malo, pero que será un proceso desconcertante y necesita estar bien informado sobre temas sexuales.

También es conveniente consultar a un médico para que apoye con la información y oriente sobre posibles problemas como dolor en los testículos, anormalidades en el desarrollo o dudas que tenga el adolescente sobre cómo cuidar su salud sexual. 

La primera menstruación en las niñas

Mientras para las niñas la primera menstruación (menarca) es un evento importante para la familia (por lo tanto, cuentan con más información), el proceso equivalente en los niños, la espermarquia, pasa casi inadvertido y con menos conocimiento al respecto.

La espermarquia es la primera producción de espermatozoides generalmente ocurre un par de meses antes de la primera eyaculación, pero que nadie nota porque se expulsa a través de la orina, informa la pediatra especialista en adolescencia, Tamara Zubarew.

La primera producción de espermatozoides y la primera eyaculación, suelen producirse en un período bastante amplio: entre los 10 y los 14 años. En promedio, las poluciones nocturnas aparecen entre los 12 y 14 años, cuando los niños han iniciado la pubertad (crecimiento paulatino de los testículos, el pene y el escroto). 

Este es el momento en el que el joven adquirirá la capacidad potencial de ser fértil, aunque en los primeros meses, la cantidad de espermatozoides en el semen puede no ser suficiente para fertilizar un óvulo, aclara la Dra. Zubarew.

¿Cómo hablar con tu hijo cuando eyacula por primera vez?

Hablar de sexo, sexualidad, salud e identidad sexual, es responsabilidad de los padres, que pueden apoyarse en médicos, literatura y educadores.

“Es fundamental abordar con franqueza las preguntas sobre el desarrollo sexual, el deseo sexual y la naturaleza de la identidad sexual en el desarrollo del adolescente…así como brindarle una correcta orientación moral para que tenga herramientas que le permitan comprender lo que le está sucediendo”, afirma Healthy Children Magazine.

Mientras más informados estén padres e hijos, habrá menos sorpresas desagradables, errores de juicio, riesgos de salud o vida, y más segura será la autoaceptación y transición a la adultez. 

La mayoría de las primeras eyaculaciones ocurren de forma inconsciente durante el sueño, pero también puede aparecer durante un proceso de autoestimulación erótica o masturbación, explica Zubarew. 

En el hombre, esto se vive como algo más íntimo. Cuando aparecen las primeras poluciones nocturnas tienden a esconderlo, porque todavía son niños. 

Afirma el psicólogo Luis Alberto Bardi que “la poca o mala información inicial trae aparejados otros problemas. Las primeras prácticas se conversan entre los amigos, sobre todo lo referente a la masturbación. Y esto a los padres les genera mucho temor de que comiencen las conductas sexuales.”

Si el chico recibe de los padres una reacción “castigadora”, asociará el sexo con algo malo. “Lo adecuado es que los padres informen al niño que es normal mojarse algunas noches, que comenzará a sentirse atraído por las niñas -o niños, si es el caso- y que quizás se masturbe, pero que estas conductas no son públicas sino íntimas, como la sexualidad”, indica Bardi. 

En los niños a veces el desarrollo físico se atrasa, lo que puede ser causa bullying o que ellos sientan que no cumplen con el estándar masculino. El crecimiento puberal tardío se puede asociar a sentimientos de inseguridad y baja autoestima.

Si un niño mayor de 14 años aún tiene un cuerpo infantil y no ha tenido las primeras poluciones nocturnas, debe ser visto por un especialista, ya que podría indicar un problema de desarrollo físico y emocional.

Internet: ¿ayuda o peligro?

Actualmente, los niños tienen muy fácil acceso a dispositivos electrónicos, redes sociales, aplicaciones y todo un mundo digital.

Vivimos en una cultura “sobresexualizada”: las letras del reggaetón y la forma en que se baila, series de streaming, información poco confiable en internet, pornografía, la “glorificación” de cierto tipo de cuerpos, además de la presión social (entre pares) para que los adolescentes vivan pronto sus primeras experiencias sexuales.

Como sabemos, “hay muchas cosas en los medios de comunicación que no son apropiadas para una edad determinada”, afirma el Dr. Charles R. Wibbelsman, coautor de “El libro del cuerpo del adolescente y El crecimiento y los cambios”. 

“Nosotros, como padres, (debemos) les advertimos sobre los riesgos y confiamos en ellos dándoles más responsabilidad solamente cuando tienen la edad suficiente y demuestran que están listos para manejarla”.

Según Healthy Children Magazine, 50% de todos los adolescentes tienen buena información y precauciones acerca de su vida sexual. Pero la otra mitad está en riesgo de tener relaciones sexuales sin protección, lo que los expone a enfermedades potencialmente graves y embarazos no deseados.

Al llegar la menarca en las niñas y espermarquia en los niños, la sobreexposición a los estímulos e información inadecuada en internet, además de las presiones por parte de sus compañeros, los pone en riesgo de tomar malas decisiones en cuanto a su sexualidad.

Cabe recordar que los malos aprendizajes son la causa principal de problemas como la eyaculación precoz, por no hablar de las enfermedades de transmisión sexual que también derivan en disfunciones sexuales.

Sin embargo, internet también puede ser una gran herramienta de ayuda para los padres. “Ver algo en los medios de comunicación con una obvia connotación sexual puede desatar una conversación entre el adolescente y sus padres”, dice el Dr. Wibbelsman. 

Evite las opiniones personales acerca de temas sexuales de forma impositiva. Hay que dar al chico la oportunidad de participar en la conversación y saber cómo piensa al respecto o qué tanta información tiene. 

Eso ayudará a desarrollar su autoestima y su confianza tanto en su capacidad para opinar, como en los padres, que serán su guía y mejores amigos en el camino hacia una vida sexual sana y placentera como adultos.

¿Cuándo es momento para hablar con los hijos sobre el sexo? 

Es conveniente comenzar a preparar el terreno para estas conversaciones mucho antes del inicio de la espermarquia y la pubertad. Cuanto más frecuentes y abiertas -según su edad y nivel de desarrollo intelectual- sean las conversaciones sobre temas sexuales, más cómodos se sentirán hablando de ello. 

Un buen modo de empezar a hablar de sexo, es cómo se exhibe la sexualidad en los medios de comunicación y cómo repercute esto en la vida real, es decir, la percepción que el niño o niña tendrán de su propio cuerpo, las consecuencias negativas que podría provocar la actividad sexual, así como el placer y los resultados positivos de la sexualidad responsable.

Recuérdale a tu hijo que siempre estarás a su lado y que tu amor es incondicional, apóyalo siempre sin importar lo que suceda.

A medida que tu hijo madure física, mental y emocionalmente, surgirán oportunidades para que las conversaciones habituales sobre la sexualidad formen parte de su diálogo permanente. Puedes leer más aquí: Conoce las prácticas sexuales más arriesgadas entre los jóvenes universitarios y sus efectos a largo plazo

Será inevitable que los adolescentes escuchen cosas y mitos urbanos como “si no tienes sexo cuando te excitas, te dolerán las bolas. “El sexo oral no es arriesgado.” “La primera vez no te embarazas.” “Si no te vienes o te vienes afuera, no pasa nada.”

Sí pasa, y mucho. Las enfermedades de transmisión sexual ponen en serio peligro la vida y desarrollo sexual de los adolescentes. Tener relaciones sexuales sin protección, aunque no haya eyaculación, no es un método anticonceptivo eficaz ni tampoco protege de contagios. 

Protegerlo de la presión y las influencias negativas

La espermarquia marca el inicio de la vida sexual.

Uno de los temas que se debe enfatizar, es que nadie tiene el derecho de presionar a tu hijo o hija para tener relaciones sexuales. Explícale que los valores son más importantes que la gratificación inmediata y que el resto de su vida sexual y su felicidad, pueden depender de las buenas o malas decisiones que tome.

Ayúdale a sentirse seguro de quién es, eso le permitirá tomar decisiones asertivas. Por ejemplo, las actitudes hacia la identidad homosexual, es difícil de manejar para los padres; a eso, habrá que sumar los prejuicios sociales.

“Es necesario que los padres sean receptivos al respecto, entiendan el espectro completo de la sexualidad y la orientación sexual, y no intenten canalizarlo en un sector o un área particulares”, explica el Dr. Wibbelsman, jefe de medicina del adolescente en Kaiser Permanente (San Francisco) y miembro del Comité de Adolescencia de la American Academy of Pediatrics.

“La clave es decirles a tus hijos adolescentes que los amas sin importar en quiénes se conviertan; que ustedes, sus padres, los amarán a pesar de todo y de las decisiones que tomen. Para muchos padres, es más fácil decirlo que hacerlo, pero esa es la clave para criar a un adolescente saludable”, concluye el especialista.

Conclusiones

La espermarquia no tiene esa connotación “ritual” de la primera menstruación. 

En los varones, los rasgos de desarrollo masculino (altura, voz, vellos, etc.) aparecen alrededor de los 14 años, después de la espermarquia o primera eyaculación, explica la Dra. Zubarew. 

La vivencia emocional de este episodio en los niños, dejará huellas o no, dependiendo de cómo la familia lo maneje y la información que tenga el preadolescente. De ello dependerá la dosis de angustia con que el joven lo viva. 

Explícale a tu hijo que la espermarquia es algo importante, pero muy normal. Que si se masturba, no le van a salir pelos en la mano ni se quedará ciego. Sólo infórmale todo lo que necesite saber sobre los cambios en su cuerpo y cómo mantener su salud sexual a lo largo de la vida.

¡Hasta pronto!
Artículo validado por Juan Manuel Martinez Preciado, Médico Cirujano con Maestría en Sexología clínica, epidemiólogo, integrante del grupo de dirección médica internacional Boston Medical Group.