¿Qué hacer frente a un gatillazo?

¿Sabías que casi todos los hombres alguna vez en su vida experimentan un problema con su erección? Esto es lo que se conoce como gatillazo. Es decir, el gatillazo es una pérdida súbita o dificultad súbita para obtener una erección de manera aislada y no repetitiva o igualmente en la aparición de un episodio de eyaculación precoz de manera aislada.

A diferencia de la disfunción eréctil. El gatillazo ocurre de manera aislada y transitoria. Hablamos de una patología cuando esto se convierte en algo persistente y en esos casos es necesario si o si recurrir a un médico experto en salud sexual. 

Las causas que provocan un gatillazo son diferentes a las de la disfunción eréctil. Hoy vamos a explicar cuáles son estas posibles causas  y de qué manera podemos hacer frente a esta situación. 

¡Allá vamos!

¿Cuáles son las causas de un gatillazo?

En la mayor parte de los casos, es el estrés y la ansiedad que nos genera el encuentro sexual el que hace que suframos un gatillazo. Es decir, es posible que la falta de erección se deba al nerviosismo del momento. 

Es común que estos nervios o ansiedad aparezcan en nuestras primeras experiencias sexuales, cuando hace mucho tiempo que no tenemos relaciones sexuales con una pareja o cuando hacemos un cambio de pareja y estamos conociendo sexualmente a una nueva persona. 

También hay algunos factores externos que pueden afectarnos momentáneamente y que colaboren a que no logremos relajarnos en el momento del acto sexual. 

Por ejemplo, el cansancio, el estrés del trabajo, una distracción o interrupción momentánea o un pensamiento puntual que pasa por nuestra mente. 

¿Qué podemos hacer frente a un gatillazo?

Lo primero es entender que puede ser una condición completamente normal, no hay que angustiarse y hay que buscar cual fue la causa. 

“luego es importante aprender a conocernos, identificar algunos signos que nos indican que no estamos en un estado de control, como la sudoración excesiva, la sudoración fría, el corazón con un ritmo muy acelerado, una respiración acelerada y superficial.” sostiene Héctor Corredor, Director Médico Internacional de Boston Medical Group.

Una vez que identificamos estos signos, podemos hacer una pausa y respirar para lograr calmarnos y concentrarnos. La idea es aprender a controlar nuestro cuerpo y nuestra respuesta ante estas circunstancias. 

La comunicación es clave en estos casos, nombremos lo que sucede a nuestra pareja. Si lo negamos, la situación probablemente se vuelva más angustiante. Evitemos los juicios de valor y aprendamos a entender el motivo de esa falta de erección. 

También puede ayudarnos continuar con el juego erótico quitándole peso a la penetración. Ya sabemos que el sexo es mucho más que eso. Podemos probar con un masaje erótico, caricias, darle sexo oral a nuestra pareja. Podemos cambiar el espacio en el que estamos teniendo sexo, eso quizás ayude y nos vuelva a estimular. 

Verás que si te relajas, pronto todo comenzará a fluir. El gatillazo es algo momentáneo y no tiene por qué significar que la relación sexual ha acabado. 

Es importante también tener en cuenta que si esta situación persiste en el tiempo y se vuelve la norma, es fundamental consultar a un médico experto porque podría tratarse de una disfunción sexual. Esto no tiene nada de malo, existen tratamientos para la disfunción eréctil o la eyaculación precoz, pero el primer paso es obtener un correcto diagnóstico. 

Esperamos que estos consejos y recomendaciones te hayan gustado y sobre todo que te sean útiles. 

¡Hasta pronto!

Artículo validado por el Dr. Jesse Jarrod Jimenez, Médico Especialista en Cirugía General, Urología, Andrología y Medicina Sexual de Boston Medical Group en México, Monterrey.