Para los hombres, la eyaculación es el punto climático de una relación sexual. Para la pareja, es el indicador de que su compañero ha llegado al orgasmo y por lo tanto, está satisfecho. Pero, ¿qué pasa si no hay salida de semen?, ¿significa que el hombre no llegó al orgasmo? Muy probablemente sí hubo una sensación orgásmica, el cuerpo no miente, sólo que el semen no fue expulsado por la uretra durante el clímax, como debería ocurrir normalmente. A esto se le llama eyaculación retrógrada o eyaculación seca. Así que la respuesta a la pregunta del título es sí, se puede tener un orgasmo sin eyacular. ¡Y te contaremos más sobre el tema en el artículo de hoy, acompáñanos!
¿A dónde va el semen en la eyaculación retrógrada?
La explicación más simple de esta condición es que en lugar de eyacular hacia afuera, el varón eyacula hacia adentro. La primera idea que tal vez nos venga a la cabeza al escuchar “eyacular hacia adentro”, es que la uretra (el orificio por donde salen el semen y la orina), se encuentra obstruida. Si así fuera, quienes padecen eyaculación retrógrada, tampoco podrían orinar, ¿cierto?
El problema no está en la uretra, lo que realmente ocurre en la eyaculación retrógrada, es que durante el coito y concretamente al llegar al orgasmo, el semen se desvía hacia la vejiga. Pero, ¿por qué ocurre esto? Trataremos de explicarlo de la forma más sencilla.
- Existen dos conductos que están conectados entre sí y desembocan en el mismo lugar: la uretra.
- Uno de esos conductos empieza en la vesícula seminal, una glándula unida a la próstata (donde se producen el semen y los espermas) y lleva el semen a través de los canales deferentes hasta el conducto eyaculador para finalmente, salir por la uretra.
- El otro conducto es el que conecta la vejiga con la uretra y transporta solamente la orina.
- Lo que separa a esos dos conductos es un músculo (músculo del cuello vesical), una especie de dique que se cierra durante la eyaculación, como la compuerta de una presa. Cuando ese músculo no tiene suficiente tono, esa “compuerta” se abre con la presión del semen, dejando pasar el líquido seminal hacia la vejiga.
Imagínate que tienes muchas ganas de orinar y no hay baño disponible, ¿qué haces? Aprietas o contienes de manera automática, sin darte cuenta, hasta que encuentras un “arbolito” cercano.
Lo mismo pasa durante la eyaculación, la compuerta se cierra de manera automática, sin que nosotros activemos el mecanismo conscientemente (las órdenes vienen del cerebro). Pero si el mecanismo no funciona por alguna razón, el semen se irá para el lado equivocado.
¿Mi orgasmo se fue junto con el semen?
No, claro que no. La eyaculación ocurre, sólo que no sale por la uretra en el momento del clímax.
Hagamos un ejercicio: cierra los ojos y recuerda todo lo que sientes cuando tienes un orgasmo. La respiración se agita, la piel se eriza, te desconectas del mundo -literalmente-, no oyes, no ves, sólo sientes; los músculos se tensan para intensificar la sensación y después, un estallido, seguido de una sensación de alivio y relajación total.
En la eyaculación retrógrada u orgasmo seco, como también se le llama, todo eso sí se siente, sólo que el semen que sale es muy poquito o de plano, no sale nada. Entonces, ¿cómo estar seguro de que sí eyaculaste? Ve a orinar después del orgasmo y observa la orina; seguramente saldrá turbia. Ese es el semen que se fue a la vejiga y saldrá después, sin mayor problema, cuando vayas al baño.
¿Ves cómo sí se puede tener un orgasmo sin eyacular?
¿Existe tratamiento para la eyaculación retrógrada?
Dado que esta condición no representa ningún peligro para la salud ni interfiere con la excitación o la erección, no es necesario aplicar tratamiento. No te privará del placer sexual, no te causará ninguna infección ni algún otro contratiempo al mantener relaciones sexuales. El cuerpo es sabio y solito eliminará lo que no deba estar allí.
Sin embargo, no está de más observar algunos aspectos. Si notas algo anormal -además de la posible preocupación por no ver semen en tu eyaculación- como ardor, mal olor en la orina o dolor (tranquilo, no va a suceder, pero debemos despejar todas las dudas); consulta con un Urólogo. La eyaculación retrógrada no presenta síntomas, así que si ves algo raro, seguro se trata de otra cosa que sí debes atender.
También hay otro dato importante. Existe una disfunción que se puede llegar a confundir con la eyaculación retrógrada, pero no tienen nada qué ver. Se llama aneyaculación. Ésta se refiere a la ausencia de eyaculación.
Sabemos que el tiempo promedio que un hombre tarda en llegar al orgasmo es de entre 5 y 15 minutos. Aunque cada pareja es diferente, ésta es más o menos la media reconocida por los expertos, ¿ok? Supongamos que después de ese tiempo o más, el orgasmo nada más no llega. Aunque la compañera sea muy paciente, “ganosa” o multiorgásmica, después de media hora, ambos darán por terminada la misión por agotamiento. Si esto pasa reiteradas veces, tenemos un caso de aneyaculación.
¿Por qué puede ocurrir? Cuando la aneyaculación se acompaña de ausencia de orgasmos o sensación de placer, en la mayoría de los causas, se debe a factores emocionales o psicológicos, como la falta de excitación -no nos referimos a la falta de deseo, bajo nivel hormonal o deficiencias en la actividad cerebral, sino a la ausencia de juegos previos o estímulos que provoquen la excitación-; poca atracción hacia la pareja o conflictos en la relación, exceso de masturbación, adicción a la pornografía, ansiedad o altos niveles de estrés, algún evento traumático del pasado o incluso creencias religiosas.
Cuando la aneyaculación sí presenta orgasmo pero no hay salida de la eyaculación y no hay eyaculación retrógrada, entonces puede tener causas físicas que imposibiliten el proceso de eyaculación, la obstrucción de los conductos seminales, medicamentos para tratar padecimientos psiquiátricos, baja de testosterona, exceso de drogas o alcohol, afectaciones en el sistema nervioso (médula espinal o a nivel cerebral), diabetes mellitus o daños concretos en la zona pélvica y conductos del pene.
En resumen, ¿cuál es la diferencia entre la eyaculación retrógrada y aneyaculación?
Como su nombre lo indica, la eyaculación retrógrada es una expulsión de semen “hacia atrás”, “hacia adentro” o como entendamos mejor la idea, pero si hay eyaculación y obviamente, orgasmo.
En la aneyaculación no existe eyaculación, es decir, si no hay semen que se vaya para ningún lado y por lo tanto, puede o no puede haber orgasmo, aunque sí haya erección.
La eyaculación retrógrada, ¿me impide procrear?
Muy buena pregunta. Éste es precisamente el único problema que presenta la eyaculación retrógrada. Al tener un orgasmo seco, los espermatozoides no llegan a donde tienen que llegar: la vagina y posteriormente, la matriz.
Aunque la eyaculación retrógrada o eyaculación seca es poco común (sólo 0,3% a 2% de los problemas de fertilidad masculina se deben a esta disfunción), podría pasar que alguna cirugía o enfermedades como diabetes, provocan hipotonía (debilidad en los músculos) en el músculo del cuello vesical y con ello, eyaculación retrógrada.
Si una pareja lleva tiempo intentando procrear y esto no ocurre, sería conveniente que ambos se realizaran exámenes de fertilidad. Cabe aclarar que la eyaculación retrógrada NO ES ESTERILIDAD, ya que el varón sí se produce espermatozoides y éstos presentan una movilidad normal, sólo que se van para otro lado.
El médico solicitará, entre otros exámenes, análisis de orina post-eyaculación, es decir, deberás autoestimularte y orinar después de eyacular, para ver si tu orina contiene espermatozoides. Si es así, el diagnóstico es inequívoco: eyaculación retrógrada.
No te preocupes porque para todo hay alternativas. Digamos que si la falta de tono en el músculo del cuello vesical está siendo provocada por algún medicamento (algunos fármacos para la diabetes, la depresión o la inflamación de la próstata tienen este efecto), bastará con suspenderlo por un rato o pedirle a tu médico que te lo cambie por otro que no cause hipotonía.
También hay medicamentos que tienen un efecto contrario, pueden ayudar a recuperar el tono muscular en el cuello de la vejiga aunque no sean específicamente para eso, tal es el caso de las efedrinas, que actúan sobre los receptores del sistema nervioso simpático (la eyaculación retrógrada también puede ser causada por una interrupción simpática, debida a una cirugía como la resección de un ganglio linfático retroperitoneal o algunos medicamentos, como ya mencionamos). Lo mejor es que consultes con el médico acerca de estas opciones, él te explicará detalladamente sobre los efectos de cada fármaco y si son adecuados para ti. Ni los busques por tu cuenta, ya que casi todos son fármacos controlados que requieren receta médica o están contraindicados para cierto tipo de pacientes.
Consideraciones finales
Desafortunadamente, no hay una cirugía que pueda corregir este problema, así que si la pareja desea tener hijos, es probable que tengan que recurrir a otras técnicas de inseminación.
- Tal vez un hombre con eyaculación retrógrada nunca llegue a darse cuenta de que la tiene, a menos que tenga problemas para la fecundación.
- El ser humano es uno de los pocos animales que practica el coito por por placer, y éste es un privilegio y un derecho del que debemos disfrutar hombres y mujeres por igual.
- Los problemas de sexualidad masculina como la disfunción eréctil, la eyaculación precoz, la curvatura peneana o la falta de deseo, pueden impedirnos llevar a cabo relaciones sexuales satisfactorias o privarnos completamente del sexo. Éste no es el caso de la eyaculación retrógrada.
- Se pueden tener orgasmos sin eyacular, la cantidad de semen no está relacionada con el grado de placer.
- El orgasmo es mucho más que la salida de espermatozoides, es el momento de conexión más íntimo y fuerte entre una pareja. Es un intercambio de energía que nos llena de vida, nos proporciona una gran dosis de adrenalina, endorfinas, oxitocina, dopamina, serotonina y un montón de sustancias que nosotros traducimos en alegría, en un placer incomparable.
- Si algo te impide gozar de la maravilla que es el sexo, consulta a un experto en salud sexual masculina y recupera tu vida sexual.
- La eyaculación retrógrada no es un impedimento para que tus encuentros sexuales culminen en esa explosión de sensaciones y emoción que es el orgasmo.
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Artículo avalado por Héctor Corredor, Médico Cirujano especialista en Urología con Maestría en Sexología Clínica, Director médico internacional en Boston Medical Group.
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