¿Cómo conservar tu salud sexual? Consejos de expertos

La salud sexual es tan importante como la salud del corazón, del cerebro o del sistema vascular. De hecho, están estrechamente ligadas. Gozar de una vida sexual plena y satisfactoria, es un indicador del estado general de una persona y parte fundamental para su calidad de vida. Todos podemos disfrutar de relaciones sexuales de calidad a cualquier edad. 

¡Lee estos consejos de expertos para conservar tu salud sexual y empieza a cuidarte desde hoy!

La importancia de la salud sexual

La salud sexual es algo que tiende a descuidarse, ya sea por desconocimiento o por pensar que, a cierta edad, la frecuencia de las relaciones sexuales disminuye o el deseo desaparece como algo “natural”. ¡Para nada! 

Si nos mantenemos en buena forma y cuidamos de nuestro cuerpo, podemos seguir teniendo una vida sexual activa, siempre. 

La Organización Mundial de la Salud define la salud sexual como “un estado de bienestar físico, mental y social, que requiere un enfoque positivo y respetuoso de la sexualidad y de las relaciones íntimas, así como la posibilidad de tener experiencias placenteras y seguras, libres de toda coacción, discriminación y violencia.”

El doctor José Benítez, director médico de Boston Medical Group, explica: “son muchos los hombres que habitualmente, visitan los consultorios de Boston Medical Group con un grado de afectación en su vida sexual. A ellos los ayudamos a enfrentar estas situaciones, provocando una mejoría en su vida sexual y, por ende, en su calidad de vida personal, laboral y familiar.”

Las disfunciones sexuales afectan no sólo la vida íntima de un paciente, sino todo su entorno, especialmente la relación de pareja.

Según el Dr. Benítez, los principales motivos de consulta en las clínicas de Boston Medical Group, son:

• Disfunción eréctil. 52% de los hombres entre los 40 y los 70 años lo padecen o padecerán en algún momento de su vida.
• Eyaculación precoz. Es la falta de control al eyacular, de forma prematura y sin poder evitarlo. Uno de cada tres hombres padece eyaculación precoz.
• Falta de deseo. También llamado deseo sexual hipoactivo, puede ocurrir por bajos niveles hormonales, alguna otra condición médica o, en muchas de las veces, por causas emocionales. 
• Curvatura peneana o enfermedad Peyronie. El pene presenta una curvatura al estar erecto, lo que provoca dolor, acortamiento del miembro masculino y puede limitar la penetración.

Factores que afectan nuestra salud sexual

Las causas son múltiples, pero una de las más frecuentes, es el envejecimiento.

Con la edad, nuestras capacidades se van mermando. Esto es algo natural. Sin embargo, la salud sexual se verá afectada en mayor o menor medida, dependiendo de nuestro estado de salud física y mental, así como del estilo de vida.

A partir de los 40 años, puede haber una menor producción de testosterona. La hormona sexual masculina suele disminuir cada vez más conforme envejecemos. Sin embargo, los índices de testosterona nunca llegan a ser tan bajos como para considerarlo una patología conocida como hipogonadismo.

Es normal que el deseo sexual disminuya junto con la testosterona, lo que también puede ser causa de disfunción eréctil. La solución en estos casos no siempre es la terapia de reemplazo hormonal, ya que los efectos secundarios de ésta, son agresivos. Sólo se recomienda en casos muy específicos y debe ser el experto en salud sexual masculina (uroandrólogo) quien indique, previo diagnóstico.

Es necesaria una evaluación detallada de cada paciente, que incluya análisis clínicos, revisión física, entrevista con el médico para conocer los antecedentes de enfermedades asociadas a disfunción eréctil, prácticas sexuales, consumo de sustancias, hábitos de vida o toma de ciertos medicamentos. 

También es aconsejable una consulta con el psicólogo y/o sexólogo, ya que muchas veces, los problemas de salud sexual son consecuencia de afectaciones emocionales, tales como depresión, problemas de pareja, estrés, traumas del pasado o miedo a un mal desempeño en la cama, por citar sólo algunas.

En el caso particular de la eyaculación precoz, es una disfunción que no necesariamente se relaciona con la edad. Se debe principalmente a factores psicológicos y, sobre todo, a malos hábitos sexuales. 

El hombre se acostumbra, desde la adolescencia, a eyacular apresuradamente, sin poner atención a lo que ocurre en su cuerpo en cada fase de la relación sexual. Si estos malos aprendizajes no se corrigen, el problema tiende a empeorar con los años.

La asesoría sexológica

La asesoría sexológica es el tratamiento más adecuado para solucionar la eyaculación prematura, con técnicas que ayudan al hombre a recuperar el control de su cuerpo y mente, desde la excitación hasta el orgasmo. El apoyo psicológico también puede ser de utilidad en caso de que exista un problema de fondo que no sea visible para la persona -como experiencias traumáticas del pasado o depresión no diagnosticada, por ejemplo-. 

El tratamiento suele ser muy eficaz si se cuenta con la disciplina del paciente. Una vez solucionada, la eyaculación precoz rara vez vuelve a aparecer.

Los malos hábitos dañan tu salud sexual

Tarde o temprano, el cuerpo pasa factura de nuestro estilo de vida.

Como explica el Dr. Benítez, la disfunción eréctil es el trastorno sexual más frecuente en sus consultorios. Este experto indica que 90% de los casos de problemas de erección, son de origen fisiológico, y de éstos, 60% están asociados a un mal funcionamiento del sistema cardiovascular.

¿Qué tiene que ver esto con los hábitos de vida? 

¡Todo! Además de las enfermedades hereditarias como diabetes, hipertensión o cardiopatías, que afectan la circulación sanguínea; la disfunción endotelial, es decir, el estrechamiento de la capa de células que cubre por dentro las venas y arterias (endotelio), se debe a hábitos como el tabaquismo y a una alimentación basada en grasas saturadas, azúcares y exceso de carnes rojas u otros alimentos ricos en colesterol.

La falta de actividad física y la obesidad, también son factores de riesgo importantes para padecer disfunción eréctil. El corazón, encargado de bombear sangre a todo el cuerpo, resiente la inactividad con el paso de los años.

Si a esto sumamos hábitos como el consumo excesivo de tabaco, estrés (que genera cortisol) y la edad -recordemos que los 50 años, es la peligrosa edad de los infartos- tenemos la receta perfecta para padecer disfunción eréctil.

Al no llegar suficiente irrigación sanguínea al pene, las erecciones simplemente no ocurren o son débiles. 

La disfunción eréctil suele venir de la mano con la falta de deseo, si es que la primera no se atiende a tiempo.

Afortunadamente, la ciencia y la tecnología médica nos brindan excelentes opciones de tratamientos para disfrutar de una buena salud sexual por mucho más tiempo. 

¿Cómo conservar tu salud sexual? Consejos de expertos

• Alimentación

Todo lo que comemos se refleja en nuestro cuerpo, incluido el pene. 

Según los expertos de Boston Medical Group, es nuestro metabolismo lo que transforma los nutrientes en energía para cumplir con las funciones vitales: respirar, pensar, caminar, dormir, etc. También produce hormonas como la testosterona, encargada de despertar el deseo sexual. 

Los alimentos que contienen grasas saturadas, el exceso de sal, carbohidratos y harinas, van formando una placa en los vasos sanguíneos que obstruyen la libre circulación de la sangre. Esta es la causa principal de disfunción eréctil.

Una mala alimentación también dificulta la producción de hormonas, de óxido nítrico -indispensable para las erecciones- y nos priva de los nutrientes necesarios para que el organismo funcione adecuadamente. 

Somos lo que comemos. Si quieres gozar de una buena salud sexual a lo largo de toda tu vida, empieza por modificar tus hábitos alimenticios.

Consume carnes magras, pescado azul -rico en omega 3-, vegetales, frutos secos y frutas. Una dieta sana es básica para tener una vida sexual saludable. 

Disminuye o elimina el consumo de azúcar refinada, que desencadena obesidad y diabetes.

• Haz ejercicio

Lo repetiremos siempre. La actividad física moderada, tres o cuatro veces por semana, durante 30-40 minutos, oxigena la sangre, estimula la circulación, te mantiene en forma, con un peso saludable; mejora tu condición física y te llena de endorfinas y otros neurotransmisores responsables del deseo sexual.

El ejercicio reduce potencialmente el riesgo de padecer diabetes, hipertensión o enfermedades del corazón. 

Si tienes un factor hereditario o ya padeces estas enfermedades, acude con los médicos de Boston Medical Group, quienes te indicarán un tratamiento personalizado para que estas afecciones influyan lo menos posible en tu vida sexual.

• Di no a las sustancias tóxicas

Para que exista una erección de calidad, la circulación en los cuerpos cavernosos del pene debe ser óptima. Hábitos como el consumo de drogas, alcohol y especialmente el tabaco, perjudican el estado cardiovascular, afectando directamente al endotelio y provocando la disminución del volumen sanguíneo. Los hombres que fuman tienen dos veces más riesgo de padecer disfunción eréctil.

El tabaquismo provoca fallas en la erección incluso en hombres jóvenes. Estás a tiempo. Deja ese mal hábito y protege tu salud sexual.

• Sexo seguro

Algunas enfermedades de transmisión sexual se curan con antibióticos. Pero hay otras que ponen en peligro tu vida y afectan tu salud sexual para siempre, como el VIH o la sífilis.

Las prácticas sexuales de riesgo no sólo te afectan a ti, sino a tus parejas sexuales, formando una cadena interminable.

Si tienes diversas parejas o sueles asistir a eventos como el chemsex (fiestas de sexo y drogas), no está de más recordarte que uses condón y visites a tu médico regularmente.

Realízate exámenes de sangre al menos cada 6 meses para confirmar que no padeces hepatitis B o C, virus de papiloma humano (VPH) o VIH.

• Acude con el urólogo

No esperes a tener una disfunción sexual. Así como las mujeres cuidan su salud sexual visitando al ginecólogo una vez al año, nosotros debemos hacer lo mismo.

Boston Medical Group ofrece programas personalizados enfocados en la prevención y el disfrute de una vida sexual más satisfactoria y duradera. 

A través de la valoración médica de expertos en salud sexual, asesoría sexológica, coaching nutricional de acuerdo a tus gustos y necesidades, y un programa de ejercicio personalizado, podrás:

• Potenciar tu desempeño sexual.
• Mantener un óptimo estado de salud física, emocional y sexual a lo largo de toda tu vida.
• Cambiar hábitos que pueden perjudicar tus relaciones sexuales.
• Encontrar un equilibrio entre cuerpo, mente y espíritu que se manifieste en tu sexualidad.
• Superar barreras emocionales para relacionarte de forma sana con los demás.
• Eliminar malos aprendizajes sexuales que se iniciaron en la adolescencia y hoy no te están dejando alcanzar tu máximo potencial en el sexo.   

• Construye relaciones sanas

El Dr. José Benítez recuerda que, con una buena educación sexual, se puede disfrutar de un sexo sano, libre, seguro, placentero y con sentido.

Conclusiones

Esperamos que sigas estos consejos de expertos para conservar tu salud sexual.

Si necesitas ayuda no dudes en solicitar asesoría experta en el tema, podemos ayudarte con mucho gusto, haz clic aquí. 

¡Hasta pronto!

Artículo validado por el Dr. Jesse Jarrod Jimenez, Médico Especialista en Cirugía General, Urología, Andrología y Medicina Sexual de Boston Medical Group en México, Monterrey.